Pediatría

Sant Joan de Déu recurre a una intervención pionera para reparar dos malformaciones a la vez a un bebé

El paciente, de 8 meses, sufría una cardiopatía congénita conocida como tetralogía de Fallot y una estenosis traqueal, que le causaban una insuficiencia respiratoria de gravedad

Cirujanos de Sant Joan de Déu durante un momento de la intervención
Cirujanos de Sant Joan de Déu durante un momento de la intervenciónSant Joan de Déu

El pasado 17 de julio, un bebé de ocho meses con tetralogía de Fallot, una cardiopatía congénita que le fue detectada durante la gestación, y una estenosis traqueal que le fue diagnosticada a los pocos días de nacer y que le causaba insuficiencia respiratoria y un estridor continuado debido a la estrechez de la tráquea, fue intervenido en el Hospital de Sant Joan de Déu mediante una operación que nunca antes se había llevado a cabo en España, en la que se abordaron ambas malformaciones.

Sobre este caso, Stefano Congiu, jefe de cirugía del Sant Joan de Déu, señala que "es muy excepcional. En el mundo se dan muy pocos casos. No hemos encontrado descritos en la literatura científica". "Normalmente, los niños afectados presentan una u otra malformación, pero es muy infrecuente que tengan las dos a la vez", añade.

Y ante casos excepcionales, medidas excepcionales. Así que, pese a que no existían precedentes de una cirugía de estas características en España, después de dejar pasar un tiempo tras el nacimiento para que el recién nacido ganara peso, los especialistas del Área del Corazón y del Servicio de Otorrinolaringología del centro optaron por tratar de reparar las dos malformaciones en una única operación.

El motivo principal de esta decisión fue el tratar de minimizar riesgos. "Sabíamos que, si sólo lo operaban de una de las malformaciones, el niño no toleraría el post-operatorio", aclara Congi. La intervención, en la que participaron 20 profesionales, duró unas cinco horas, durante las primeras de las cuales los cirujanos cardíacos repararon la malformación del corazón.

Para ello, tuvieron que recurrir a la circulación extracorpórea puesto que fue necesario cerrar la comunicación anómala que existía entre los dos ventrículos con un parche de pericardio, para, a continuación, ampliar la salida del ventrículo derecho hacia las pulmones y permitir así la oxigenación y circulación normales de la sangre.

Tras comprobar mediante ecocardiografía que se había completado la corrección de la Tetralogía de Fallot, los otorrinolaringólos procedieron a cortar una sección de la tráquea en la zona media para desplazar los extremos y sobreponer uno sobre el otro con el fin de ampliar el conducto traqueal, siempre con el niño en circulación extracorpórea, y concluir así con la reparación de la malformación traqueal.

Tras la intervención, que ha permitido mejorar la respiración del paciente y acabar con el estridor, el niño fue trasladado a la UCI y un mes después recibió el alta

.