
Medios públicos
TV3 y Catalunya Ràdio disparan su dependencia de la Generalitat: la CCMA recibió un 35% más de subvenciones en 2024
El salario medio por empleado se situó en los 81.500 euros anuales

La Corporació Catalana de Mitjans Audiovisuals (CCMA), el ente que gestiona los medios públicos de Cataluña, cerró el ejercicio 2024 con un marcado aumento en su dependencia de la financiación pública. Según la memoria anual consolidada aprobada por el Consejo de Gobierno, a la que ha tenido acceso este periódico, TV3 y Catalunya Ràdio recibieron el año pasado 359,7 millones de euros en subvenciones procedentes de la Generalitat, un 35% más de lo presupuestado inicialmente (265,3 millones). Esta desviación de 94 millones se explica, principalmente, por la caída de los ingresos publicitarios y el aumento de los gastos de personal.
En concreto, los ingresos totales del conglomerado público pasaron de 51 a 53 millones de euros, una cifra insuficiente para cubrir los costes operativos. Solo los gastos de personal ascendieron a 202 millones de euros, diez más que el año anterior, debido al incremento de la plantilla de 2.445 a casi 2.500 trabajadores. El salario medio por empleado se situó en los 81.500 euros anuales, muy por encima del promedio del sector. A modo de comparación, Atresmedia cuenta con 2.580 colaboradores y Mediaset con 1.600.
Pleitos fiscales y contabilidad al límite
La situación económica de la CCMA se complica aún más por los litigios abiertos con la Agencia Tributaria. La corporación acumula más de 108 millones en contingencias fiscales, derivadas principalmente de reclamaciones por IVA y el Impuesto de Sociedades. De hecho, Hacienda llegó a exigir 113 millones de euros, cifra que los tribunales redujeron a 58 millones, pendiente aún de recurso. A esto se suma un segundo pleito por otros 26 millones.
A pesar de que los recursos propios de la CCMA son negativos en 22 millones, el ente ha elaborado sus cuentas bajo el principio de “empresa en funcionamiento”. Esta decisión se justifica en su absoluta dependencia del presupuesto de la Generalitat, que garantiza su viabilidad con fondos públicos.
Investigación judicial por sueldos y nombramientos
La situación financiera y de gestión del ente está siendo también objeto de una investigación judicial. Una jueza ha abierto diligencias por presuntos delitos de prevaricación y malversación relacionados con el nombramiento y la retribución de altos cargos en la CCMA, que engloba a TV3 y Catalunya Ràdio.
Las sospechas apuntan a un reparto de cargos de libre designación con criterios políticos, pactados entre los partidos independentistas y el PSC durante el mandato de Pere Aragonès. Los actuales responsables del ente son, en su mayoría, afines a Esquerra Republicana y Junts. Según la Sindicatura de Comptes, algunos de estos directivos llegaron a cobrar más de 120.000 euros anuales, superando incluso el salario de un conseller de la Generalitat, lo que vulnera la normativa vigente.
Contratación opaca y denuncias internas
El mismo informe denuncia deficiencias en los procesos de selección, como la falta de publicidad, transparencia y valoración objetiva de méritos. Estas prácticas ya habían sido denunciadas por trabajadores ante el Síndic de Greuges, quienes alertaron de un organigrama inflado artificialmente con nombramientos arbitrarios.
Desde la CCMA defienden que los procedimientos se ajustaron a la legalidad y que las convocatorias no fueron impugnadas en su momento. Aseguran también que los méritos de los candidatos se valoraron en su conjunto.
Blindaje institucional y futuro asegurado
Pese al cúmulo de problemas económicos, fiscales y judiciales, el futuro de la radiotelevisión pública catalana no está en duda. En enero de 2024, la Generalitat firmó un contrato con la CCMA que garantiza una financiación mínima de 1.347 millones de euros en los próximos cuatro años. Esta cifra asegura la continuidad de TV3 y Catalunya Ràdio, así como el mantenimiento de sus actuales estructuras salariales y de personal.
Gracias a las cuantiosas inyecciones públicas, la CCMA cerró el ejercicio 2024 con un beneficio neto de un millón de euros, que se destinó a paliar pérdidas acumuladas de ejercicios anteriores. Todavía arrastra un déficit de 25 millones. En 2023, el resultado fue ligeramente superior: 1,2 millones de beneficio.
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