Acusan a Elon Musk y su empresa de chips cerebrales de haber causado la muerte de 12 monos, justo cuando comienzan los ensayos en humanos

Elon Musk y Neuralink, su empresa dedicada al desarrollo de chips cerebrales para humanos, han sido denunciados por su presunta responsabilidad en la muerte de doce monos, neuralink.

El magnate ha sido acusado por la ONG Comité de Médicos para una Medicina Reponsables ante la estadounidense Comisión de Bolsa y Valores, conocida como la SEC. Las denuncias llegan justo cuando acaban de recibir autorización para comenzar a instalar los chips en humanos.

Según señalan en los documentos trasladados al SEC, doce monos Rhesus, que no superaban de media los siete años y estaban sanos, fueron sacrificados como consecuencia de los negativos efectos que para su salud tuvieron los implantes cerebrales. Sufrieron desde una parálisis parcial hasta un edema en el cerebro.

El propio Musk, que hasta entonces había permanecido en silencio sobre el asunto, se pronunció el pasado 10 de diciembre para defender que "ningún mono ha muerto como resultado de un implante Neuralink", al tiempo que señaló que solo empleaban para los experimentos a primates con poca esperanza de vida.

El fin de estos dispositivos que se colocarían en el cerebro es, por ejemplo, lograr que personas tetraplejicas o con ELA puedan controlar todo tipo de dispositivos y objetos con el mero pensamiento.

No es, sin embargo, la primera vez que desde que empezaron los ensayos se les responsabiliza de maltrato animal y otros delitos que atentan contra su bienestar. Rueters reveló en diciembre de 2022 que Neuralinks fue investigada federalmente por el trato que recibieron 1.500 ovejas, cerdos y monos, después de que actuales y antiguos trabajadores hablasen de "sufrimiento y muertes innecesarias".