La dieta del padre determina la salud de sus hijas

Las enfermedades cardiovasculares (ECV) son la principal causa de muerte a nivel mundial. Se trata de un grupo de trastornos que afectan al corazón y los vasos sanguíneos. La hipertensión (presión arterial alta) es un factor de riesgo importante para la ECV. En España, más de 10 millones de personas padecen enfermedades y patologías relacionadas con el corazón, de las cuales más de 120.000 personas fallecen cada año, según datos del Instituto Nacional de Estadística. Una forma de prevenir esto es con prácticas saludables, pero los resultados no son iguales para todos.

Un estudio con ratones liderado por Changcheng Zhou, de la Universidad de California en Riverside, ha descubierto que cuando los hombres se convierten en padres, una dieta poco saludable y rica en colesterol puede aumentar el riesgo de ECV en sus hijas. Los resultados, publicados en JCI Insight, son los primeros en demostrar este resultado, que este efecto se observa solo en las crías femeninas.

En una serie de experimentos, Zhou y su equipo alimentaron a ratones macho genéticamente modificados con una dieta rica en colesterol, lo que les provocó hiperlipidemia, un trastorno que, si no se trata, puede provocar enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares. A continuación, se aparearon estos ratones con hembras alimentadas con una dieta normal baja en colesterol. Su camada también fue alimentada con una dieta baja en colesterol, pero los análisis mostraron que las crías hembras tenían un aumento de aterosclerosis de dos a tres veces.

“Anteriormente, se pensaba que los espermatozoides aportan solo su genoma durante la fertilización – señala Zhou -. Sin embargo, estudios recientes han demostrado que las exposiciones ambientales, incluida la dieta poco saludable, los tóxicos ambientales y el estrés, pueden alterar el ARN en los espermatozoides para mediar la herencia intergeneracional”.

El ácido ribonucleico, o ARN, está presente en todas las células vivas. Este ácido nucleico, que tiene similitudes estructurales con el ADN, es esencial para la mayoría de las funciones biológicas en los organismos vivos y los virus.

“Los hombres que planean tener hijos deben considerar comer una dieta saludable y baja en colesterol y reducir sus propios factores de riesgo de ECV – añade Zhou -. Estos factores parecen afectar a sus espermatozoides al influir en la salud de su descendencia femenina. Nuestro estudio sugiere que el esperma transmite esta información a la siguiente generación”.

El estudio se centró en la aterosclerosis, una enfermedad inflamatoria crónica que es la principal causa de ECV. En la aterosclerosis, la placa, una sustancia pegajosa compuesta de colesterol, grasa y otras sustancias en la sangre, se acumula en las paredes de las arterias. Cuando la placa se endurece, estrecha las arterias, lo que limita el flujo sanguíneo al cuerpo y reduce el suministro de oxígeno a los tejidos de los órganos vitales.

El esperma contiene una gran cantidad de pequeñas moléculas de ARN no codificantes, que son importantes para la regulación genética y muchos procesos celulares. Cuando se modifican, sus funciones cambian significativamente en varios procesos biológicos. El equipo de Zhou descubrió que las pequeñas moléculas de ARN en el esperma de ratones alimentados con una dieta alta en colesterol sufren alteraciones en respuesta a la exposición a la dieta. También hallaron que las pequeñas moléculas de ARN alteradas pueden afectar la expresión genética temprana en las células madre embrionarias de ratón.

El estudio explora un área poco visitada respecto a la salud: el impacto de las exposiciones paternas en la salud de la descendencia, algo que se ha pasado por alto en gran medida.