Cambio Climático

La escasez de agua en España influye en los alimentos de toda Europa

La ONU señala que casi el 75% del país es susceptible a la desertificación, pero España produce seis de cada diez hortalizas consumidas en Europa.

Los viveros perderán el 75% de la producción si no empiezan a vender ya
Los viveros de España producen el 60% de las hortalizas de Europa.Manuel BruqueAgencia EFE

El 25 de abril, España solicitó a la Unión Europea fondos de emergencia para ayudar a los agricultores a lidiar con una grave sequía que amenaza los cultivos. Apenas dos días después se registraron las temperatura más alta en abril: 38,8 ºC en Córdoba. Por si esto no fuera suficiente, los embalses de agua están a la mitad de su capacidad a nivel nacional y COAG (Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos) señala que el 60% de las tierras de cultivo se están "asfixiando" por la falta de lluvia. El año pasado, España experimentó su año más caluroso desde que comenzaron los registros, con cifras de la ONU que sugieren que casi el 75% de su tierra es susceptible a la desertificación debido al cambio climático. Pero el problema no solo es en España ya que seis de cada diez hortalizas consumidas en Europa proceden de invernaderos del sur del país.

La clave es el agua. Más del 80% del agua dulce en España es utilizada por la agricultura, (los hogares utilizan el 12,8% y el 5,1% restante se destina a otras actividades económicas). De hecho, de acuerdo con la economista Judit Montoriol Garriga, “el regadío es una parte fundamental de nuestro sistema agroalimentario: la superficie regada en España representó el 22,9% de la superficie cultivada en 2021 pero su producción aporta algo más del 50% de la producción final vegetal”.

El uso es uno de los aspectos. El otro es el cambio climático. Y el tercero es el descenso del río más largo de la Península Ibérica. Las regiones que cruza se está “convirtiendo en una de las más áridas de España”, según Domingo Baeza, profesor de ecología fluvial de la Universidad Autónoma de Madrid.

Todo habría comenzado con el trasvase del Tajo-Segura que permitió que el sur de España se convirtiera en el centro hortícola más grande de Europa. Pero hoy “el Tajo está sufriendo – añade Baeza –. Está degradado en numerosos lugares... porque hemos superado con creces su capacidad con la expansión descontrolada de la tierra que riega”. Al mismo tiempo que la temperatura media se ha disparado 1,3ºC desde que se terminó el trasvase, el caudal del río ha disminuido un 12% y podría caer hasta un 40% en 2050.

Se tome la decisión que se tome respecto al trasvase, sea respetando las normas ambientales de la UE o las necesidades de los agricultores, es necesario contar con el mayor conocimiento posible para afrontar esta situación.