Sucesos

Arde hasta las cenizas una nave de electrodomésticos

Los bomberos tardaron tres horas en extinguir un complicado incendio en Alicante

Los bomberos evitaron que las llamas se propagasen a las naves colindantes
Los bomberos evitaron que las llamas se propagasen a las naves colindanteslarazon

Un operativo con cerca de treinta bomberos del Servicio de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamento del Ayuntamiento de Alicante (SPEIS) fueron movilizados la tarde del miércoles para intervenir, durante varias horas, en las difíciles tareas de extinción de un complicado incendio originado en el interior de una nave industrial de aparatos electrodomésticos, situada en la calle Benejama, que quedó calcinada.

En el incendio ardió toda la nave durante más de dos horas, generando grandes llamaradas y una amplia columna de humo, debido a la elevada carga térmica del interior, sin que nadie resultara herido, y evitando por la rápida intervención de los bomberos que se propagase a las demás naves.

El SPEIS, recibió el aviso sobre las 18 horas, y hasta el lugar del incendio industrial se desplazaron ocho dotaciones completas, seis de bomberos del Ayuntamiento y dos de refuerzo del Consorcio de la Diputación, con una treintena de bomberos, así como varias cubas de agua de la UTE de Limpieza.

La Policía Local de Alicante desplazó a siete patrullas de Barrios, Tráfico y la Fox de la Policía Local de Alicante para coordinar la emergencia que tuvieron que establecer un perímetro de seguridad, balizar la zona para evitar el acceso a las calles Benejama y Poeta Pastor, y desalojar a cerca de un centenar de personas preventivamente de tres naves colindantes y un gimnasio situadas en la carretera de Ocaña.

Los bomberos del SPEIS al llegar comprobaron que el fuego estaba localizado en el interior de la nave, que se encontraba ardiendo y cerrada sin nadie en el interior, teniendo que tirar abajo una de las puertas de acceso. El incendio tenía una gran carga térmica debido al material y los aparatos frigoríficos y electrodomésticos que estaban ardiendo provocando que el fuego estuviera arrasando la nave.

El SPEIS para extinguirlo dividió a los efectivos de bomberos en varios equipos que comenzaron a atacar las llamas desde el exterior divididos en tres frentes y en varios ejes de ataque, desde dos puntos diferentes de la nave, se atacaba en dos frentes con varias dotaciones montando siete líneas de agua, y con el vehículo escalera se atacaba desde arriba las llamas. Las tareas de extinción fueron muy difíciles y tras dos horas de intenso trabajo se ha logrado controlar.

Según los bomberos el incendio fue muy complicado de extinguir ya que no se podía acceder al interior por la gran carga térmica, debido a que el fuego había destruido toda la estructura de la nave que se encontraba muy afectada, y corría el riesgo de que se viniera abajo. Para realizar las labores de extinción y poder apagar en su totalidad el incendio, fue necesario el refuerzo con cinco cubas de agua.

El fuego se declaró por motivos que se desconocen, cuando no había nadie en su interior, y las labores de extinción se alargaron más de tres horas. La nave donde se almacenaban electrodomésticos quedó calcinada.