Infraestructuras ferroviarias
Las Cercanías ponen hoy a prueba el compromiso inversor de Fomento
La Comisión de Seguimiento, en la que está presente Adif, Renfe, Gobierno y Generalitat, aborda hoy las medidas urgentes para acabar con el caos circulatorio
En los últimos diez años el alta velocidad se ha llevado el 80 por ciento de la inversión ferroviaria de Adif. El 20 por ciento ha quedado para las Cercanías. Este porcentaje, por tanto, es inversamente proporcional a los viajeros que usan uno y otro servicio. Casi el 87 por ciento de los usuarios (440 millones en 2018) corresponde a las cercanías y el seis por ciento (29,98 millones) al AVE.
Estos datos, elaborados por la Cámara de Contratistas de la Comunitat Valenciana, evidencian las carencias a las que se ha sometido la red ferroviaria convencional y que ha llevado a un incremento de las incidencias en los últimos cinco años.
En 2015 el índice de circulaciones anuladas suponía el 0,37 por ciento, un porcentaje que fue subiendo al 0,83 en 2016, al 3,5 en 2017, al 3,60 en 2018, hasta cerrar el 2019 con un 4,77 por ciento y sumar 7.539 cancelaciones.
Desde Renfe, apuntan a que un importante número se debe a condiciones meteorológicas adversas y como ejemplo, apuntan que durante la DANA de septiembre se cancelaron 2.000 trenes.
En cualquier, caso la situación es insostenible para los usuarios, que se han cansado de soportar retrasos y cancelaciones.
Para solucionar esta cuestión, hoy se reúne la Comisión de Seguimiento en la que participa la Generalitat, Renfe, Adif y el Ministerio de Fomento. Se espera la concreción al Plan de Choque anunciado.
¿Por qué hay retrasos?
Uno de los motivos es la falta de maquinistas. Desde Renfe aseguran que la reposición del personal se realiza en tiempo real, pero de manera puntual se producen «desequilibrios». En la práctica esto supone la cancelación de trenes, ya que aunque se hayan incorporado a la plantilla tras una jubilación puede que no hayan completado el periodo de formación exigido, que dura más de tres meses.
También admiten que durante los últimos años ha habido retrasos provocados por obras en la red y la falta de trenes para sustituir los averiados.
Un plan de 1.500 millones
En 2017 se presentó un Plan de Cercanías que contenía inversiones por valor de 1.436 millones. El horizonte del plan era a cinco años y a día de hoy, Adif únicamente ha iniciado el 8,9 de las obras previstas. Además, en fase de redacción de proyecto solo hay licitaciones por valor de cuatro millones. Por su parte, Renfe no ha invertido ni un euro de los 354,73 comprometidos para renovar los trenes, según afirma la Cámara de Contratistas.
✕
Accede a tu cuenta para comentar