El testimonio de una enfermera: “Escuchar lo que le dice una persona a su familia tras dos meses intubada, se te graba en la memoria para siempre”

Una enfermera de la unidad de Reanimación del hospital comarcal de la Marina Baixa, en Villajoyosa, ha desvelado que actualmente la media de edad de los pacientes con la covid-19 que ingresan en la UCI se suele situar entre los 27 y 50 años.

En declaraciones a Efe Televisión tras salir del turno de noche, esta enfermera, cuyas iniciales son M.J.N.M., ha relatado que la actual tercera ola del coronavirus “es el triple peor que la primera”, que su día a día se desarrolla en “condiciones extremas” y que los profesionales sanitarios están más preparados ahora que en marzo de 2020 pero también “más cansadas y más cansados”.

Debido a que la edad media de los que acaban en la UCI ha bajado notablemente, ha urgido a tomar más medidas y ha sugerido a la población que aún es relativamente escéptica a que visiten, con las adecuadas condiciones de seguridad, el interior del hospital para “ver con sus propios ojos” lo que ocurre y pasar a ser “conscientes de lo que está pasando”.

”Pedimos a la gente que se cuide, que dejen de hacer esas fiestas que es donde hay contagios porque muchos ancianos cogen el virus de sus nietos”, ha advertido esta enfermera, que ha vaticinado que, lejos de detenerse, la pandemia pueda agravarse: “el mes que viene será aún más difícil que este”.

Una compañera de la unidad de Cirugía (ahora convertida en planta covid), Cristina Gimeno Luna, ha animado a la población al autoconfinamiento con el argumento de que si no se actúa de este modo la expansión del virus “no va a tener fin”.

De esta manera, ha instado a evitar una posible “relajación” e “insensibilización” ante los efectos de la pandemia porque “detrás de una cifra hay una vida que se pierde, una familia que sufre y una carga terrible”.

”Por favor, seamos conscientes de que nosotros solos no podemos acabar con esto, que necesitamos la colaboración de cada uno en casa y que los sanitarios no somos suficientes para parar la curva”, ha relatado esta enfermera, que ha calificado la situación del hospital de La Vila como “insostenible”.

Lo que ha vivido en los últimos meses le ha llevado a publicar un post en las redes sociales que, bajo el título de ‘Confinamiento o muerte’, se ha hecho viral. Lo ha escrito tanto para desahogarse como para tratar de remover alguna conciencia para conseguir que las personas decidan por su propia voluntad el autoconfinamiento como único método efectivo para parar la expansión del virus.

De la actividad de los sanitarios, ha incidido en que viven a diario experiencias “muy duras” que son incapaces de no llevarse a casa, y ha resaltado que esta situación excepcional se está “prolongando demasiado en el tiempo” y que los profesionales del hospital no están entrenados para sobrellevarlo.

De los momentos más difíciles ha recordado “las muertes en solitario: ser la única persona que puede sujetar la mano de ese paciente que se va solo”. O “sujetar los móviles de los enfermos para hablar con familiares tras dos meses intubados” y escuchar todo lo que en esos instantes se dice: “Eso se te graba en la memoria para siempre”.

Gimeno Luna ha pedido públicamente a las autoridades medidas más duras que las que están tomando ya que, pese a que sabe que es complicado tomar la decisión de un confinamiento, hay que tener presente que “sin vida no hay economía”.

Entre las causas de la situación precaria del ámbito sanitario, ha señalado los 10.000 médicos y enfermeros que se han tenido que marchar al extranjero en los últimos años por las malas condiciones laborales.