Puig asume que en 2021 no habrá una solución a la infrafinanciación

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, confirmó ayer que este año volverá a pasar en blanco en lo que a avances del sistema de financiación se refiere. De momento, la Comunitat Valenciana tiene que conformarse con haber logrado que el Gobierno de España se haya concienciado de los valencianos están maltratados por el modelo actual. Esta fue la respuesta que dio ayer el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, durante la sesión de control cuando la síndica del PP, Eva Ortiz, le echó en cara que el Ejecutivo de Pedro Sánchez no tenga marcada en su agenda la infrafinanciación de la Comunitat Valenciana.

«Está en el horizonte», defendió Puig y aprovechó para dar al PP la bienvenida a la Plataforma pel Finançament. «Más vale tarde que nunca» y aunque volvió a insistir en que el cambio de modelo es vital para tener garantizada la capacidad de crecimiento económico, no pudo hacer más que asumir que no hay solución a corto plazo y que «el partido se juega en Madrid».

Desde la Generalitat se esfuerzan por defender que el Gobierno central está respondiendo con puntualidad a las necesidades de liquidez que conlleva el modelo actual y que se han visto agravadas por la pandemia. Es más, dan por seguro que el Ejecutivo central cubrirá los 1.325 millones de euros que se colocaron este año en los Presupuestos de la Generalitat y que se reclaman como imprescindibles para atender los gastos en Educación, Sanidad y políticas sociales. A esta partida, la oposición le ha puesto el calificativo de «ficticios», mientras que el Botànic prefiere llamarles «reivindicativos».

Desde la Generalitat, por tanto, se asume que la situación política vuelve a ser poco propicia para que el Gobierno logre un consenso en esta materia con las comunidades autónomas, recuerdan que los criterios del reparto de los fondos covid no son los mismos que rigen para la financiación e insisten en que el apoyo del PP es fundamental para lograr la mayoría parlamentaria en el Congreso que apoye el cambio.

Sin embargo, al PP, Ciudadanos y también a los socios de Puig en el Gobierno, Unides Podem y Compromís les parecen insuficientes estas medidas. De hecho, el síndic de la formación nacionalista, Fran Ferri, hizo una llamada a todos los grupos políticos a «plantarse» ante el retraso en la reforma del sistema, y «no aceptar ni un ninguneo más, ni un insulto más».

Ortiz acusó a Puig de «agachar la cabeza» y de «huir» de sus responsabilidades como presidente aceptando el «ninguneo» al que se somete a la Comunitat Valenciana. Además, le preguntó si no era importante que estuviese ayer en Madrid en la protesta que realizó la Plataforma pel Finançament y reclamó una reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) con calendario y plazos para la reforma. «No más demoras ni engaños».

El conseller de Hacienda, Vicent Soler, aseguró que la presencia de Puig no era necesaria porque se trata de una reivindicación de la sociedad civil. «Las casas no empiezan por el tejado» y defendió que la ministra Montero sí prevé incluir el criterio de población en el nuevo modelo.