El Gallinero

“Batallita” entre PSPV y Compromís

La mecha prendida por la vicealcaldesa, la socialista Sandra Gómez, era puro artificio

La vicealcaldesa de Valencia, Sandra Gómez, y el alcalde Joan Ribó, en una imagen de archivo
La vicealcaldesa de Valencia, Sandra Gómez, y el alcalde Joan Ribó, en una imagen de archivoLa RazónLa Razón

La confrontación de estos días entre dirigentes del PSPV y de Compromís ha animado el escenario político valenciano. Resulta divertido, entre otras cosas, porque representa escrupulosamente nuestra idiosincrasia, mucha carcasa y nada de sangre, algo de ruido y pocas nueces.

La mecha prendida por la vicealcaldesa, la socialista Sandra Gómez, era puro artificio. Su objetivo de feminizar su lucha por la alcaldía “Valencia necesita un cambio de ciclo” finiquitando la era de Joan Ribó con el relevo de una mujer, rezuma banalidad, al igual que su descalificación de las respuestas de Compromís “tratan de ningunear e invisibilizar a las mujeres”, sobre todo porque olvida que el “cap i casal” ha estado regido más años por una mujer que por un hombre desde que se instauró las democracia. De los 42 años transcurridos desde las municipales de 1979, Rita Barberá ocupó 24. Para los hombres 18.

No le andan a la zaga las respuestas de Compromís a través de su diputado Joan Balldoví. Su “¿quién es Sandra Gómez?” no pasa de ser una superficialidad para molestar la vanidad.

Dicho esto, entiendo que Sandra Gómez desee ser alcaldesa de la ciudad donde nació. No todos podemos decir los mismo. Comprendo cierta frustración por estar a las puertas pero no superar en escaños a su contrincante. Y, especialmente, la imposibilidad de serlo mientras la Generalitat dependa del apoyo de Compromís.

Como se ve, ninguna referencia a la corrupción de un concejal procesado, otros imputados, así como otros cargos de los dos partidos, argumentos realmente dañinos. De eso nada, olmo si se justificaran unos a otros. Mientras tanto “aunque nos odiemos, divirtámonos pero no nos hagamos daño”. Así es la vida.