Agricultura
La Unió de Llauradors pide que se declare l’Horta zona afectada por la emergencia climática
Los daños en los cultivos como consecuencia de los fenómenos meteorológicos han ocasionado pérdidas en cultivos y daños en infraestructuras agrarias
La Unió de Llauradors ha solicitado al Consell de l’Horta, a través de la Conselleria de Agricultura, que inicie los trámites necesarios para solicitar al Gobierno central la declaración de zona afectada gravemente por una emergencia de protección civil a toda esa comarca a consecuencia de las pérdidas millonarias ocasionadas por la climatología de los últimos meses.
Los cuantiosos daños en los cultivos de l’Horta como consecuencia de los fenómenos acaecidos en marzo, abril y principios de mayo han ocasionado pérdidas en cultivos, daños en infraestructuras agrarias y jornales que se van a perder.
A efectos de la declaración de una zona afectada gravemente por una emergencia se valora, como es el caso, que se hayan producido daños personales o materiales derivados de un siniestro que perturbe gravemente las condiciones de vida de la población en un área geográfica determinada o cuando se produzca la paralización, a consecuencia de este, de todos o algunos de los servicios públicos esenciales, recuerda este lunes La Unió.
La solicitud, tramitación y medidas a aplicar de una zona afectada gravemente por una emergencia se rige por lo estipulado en la Ley 17/2015, de 9 de julio, del Sistema Nacional de Protección Civil, que contempla, entre otras medidas, ayudas por daños en producciones agrícolas, ganaderas, forestales y de acuicultura marina; medidas fiscales (exención de la cuota del IBI, reducción del impuesto de actividades económicas y de los índices de rendimientos netos de las explotaciones y actividades agrarias), o medidas laborales y de Seguridad Social.
Paralelamente, pide al Consorci del Consell de l’Horta que se dirija tanto a la Conselleria de Agricultura como a la Delegación del Gobierno en la Comunitat para que pongan en marcha una serie de medidas para paliar la grave crisis para las economías familiares que se ha creado a raíz de las inclemencias meteorológicas sufridas.
Entre ellas, el establecimiento de un sistema de ayudas directas a los agricultores con daños en sus cultivos por efecto de alguno de los episodios meteorológicos -lluvia, humedad, ausencia de sol, viento o helada- y también ayudas estatales reguladas en el Reglamento (UE) 1408/2013 de la Comisión de 18 de diciembre, de 20.000 euros por empresa agraria en tres ejercicios fiscales.
Se reclama una reducción del índice de rendimiento neto al IRPF hasta cero de las producciones afectadas para quienes tributan por el Régimen de Estimación Objetiva; y para el Régimen de Estimación Directa, incremento del porcentaje de gastos de difícil justificación al 20 %.
También una condonación del pago del Impuesto de Bienes inmuebles de los bienes afectos a la actividad agraria (independientemente si está en zona rústica o urbanizable) afectados por cualquier de los episodios meteorológicos, compensando desde el Estado la pérdida de ingresos de los ayuntamientos.
Del mismo modo, se pide una bonificación del 50 % de las cuotas de la Seguridad Social durante un año, el establecimiento de líneas de crédito preferenciales de 5 años, con uno de carencia, y con una bonificación total de los intereses; así como la posible reparación de las infraestructuras agrarias para poder acceder a las explotaciones para los trabajos de adecuación de estas y realización de las tareas necesarias para la recuperación productiva.
Otra petición pasa por que los afectados que sean beneficiarios de ayudas a la primera instalación de jóvenes o ayudas a las inversiones en explotaciones agrarias obtengan una moratoria en el cumplimiento de los plazos burocráticos establecidos en estas ayudas hasta recuperar la capacidad productiva de la actividad.
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