El jurado declara a Jorge Ignacio Palma culpable del asesinato de Marta Calvo y de otras dos mujeres

Jorge Ignacio Palma ha sido declarado culpable de la muerte de Marta Calvo, así como también de la de Arliene Ramos y Lady Marcela, y de seis intentos de asesinato en grado de tentativa. Además, el jurado considera que el asesino no debe ser indultado por el Gobierno en ninguno de los casos.

En el caso concreto de Marta Calvo, Palma ha sido declarado culpable por la unanimidad de los nueve miembros del jurado. Considera este que “al hacer desparecer el cuerpo de la víctima, oculta la posible causa de la muerte quedando la misma indeterminada. Entendemos por su patrón de conducta que actuó de forma sorpresiva, sin esperarlo la víctima y sin ninguna opción de defensa por su parte, y vulnera la libertad de elección de la victima en unas prácticas que ella no hubiera querido”. Considera también el jurado que haciendo desaparecer el cuerpo de Marta Calvo aumenta el dolor de la familia.

Palma ha sido declarado, en muchos casos por unanimidad, culpable de haber provocado la muerte de tres personas, y de no haber provocado la muerte del resto de chicas que sobrevivieron y de las que se le acusa, “por motivos ajenos a su voluntad”. También lo declaran culpable de haberles incitado al consulto de cocaína en las denominadas “fiestas blancas”.

En la mayoría de los casos, al menos siete miembros del jurado lo han declarado culpable, circunstancia esta necesaria para llegar a tal declaración, mientras que con solo cinco votos favorables hubiera sido declarado inocente, circunstancia ésta que no se ha dado en ningún caso. En otros casos, han sido ocho los miembros del jurado que lo han declarado culpable, y en el caso concreto de Marta Calvo, ha habido unanimidad en su culpabilidad.

Prisión permanente revisable

Tras la lectura del veredicto, todas las acusaciones particulares que representan a las seis chicas que sobrevivieron a Palma, así como la que representa a Arliene y Lady Marcela, y la que representa a los padres de Marta Calvo, han pedido para el asesino la prisión permanente revisable.

Su señoría, Clara Bayarri, ha agradecido “de todo corazón” al jurado su dedicación y les ha dicho que ahn hecho un trabajo dificilísimo: “en nombre de toda la sociedad, se lo agradezco. Pueden estar orgullo” y ha dado el caso como visto para sentencia, aunque ha advertido que “no la esperen dentro de dos días”.

“El cuerpo de mi hija va a aparecer”

A la salida de la sala de vistas, Marisol, la madre de Marta Calvo ha dado entre lágrimas las gracias a su hija “porque gracias a aquella bendita ubicación que me enviaste, este tío no va a salir de la cárcel”. Ha dicho que “sabía que iba a salir culpable, no podía ser de otro modo”. Y ha clamado mirando al cielo “yo sé que mi hija va a aparecer, Marta va a aparecer, seguro que sí”.

Un juicio largo y complejo

La defensa de Jorge Ignacio Palma aseguró en su alegato final que no había pruebas de que el acusado haya causado la muerte o haya querido causar las muertes de las tres mujeres por las que se les juzga, e indicó que las declaraciones de las otras víctimas parecían estar “guionizadas”.

En su informe ante el jurado la letrada defendió que si el “no es no”, el “sí es sí, aquí y en cualquier sitio” y todas aceptaron la denominada “fiesta blanca” y cuando dijeron “vale”, el acusado “paró”.

Jorge Ignacio Palma, autor confeso de la desaparición de Marta Calvo y supuesto asesino de otras dos jóvenes -Arliene Ramos y Lady Marcela Vargas-, para la que su defensa pide la absolución, se enfrenta a las peticiones de penas que suman 120 años de prisión por parte del Ministerio Fiscal, y a la prisión permanente revisable que han solicitado las acusaciones por tres asesinatos con alevosía.

Por su parte, la fiscal había acusado a Palma de ser un depredador sexual, en torno al cual hay “un relato de perversión y sadismo”, y mostró su convencimiento de que hay más víctimas.

La fiscal pedía para Palma penas que suman 120 años de prisión por abuso sexual como medio necesario para un delito de homicidio cometido contra las tres mujeres, abuso sexual contra otras seis mujeres -sorprendentemente, la Fiscalía no pidió pena para una séptima vícitma- y un delito contra la salud pública por facilitar o favorecer el consumo de drogas.

En su informe ante el jurado, afirmó que el acusado utilizó el mismo modus operandi con las víctimas que sobrevivieron y con las que murieron: se aproximaba a ellas con la condición de la “fiesta blanca” (relaciones sexuales y consumo de cocaína) e introducía la droga en los genitales de las mujeres, en unas circunstancias “perfectas” para él pues “había prostitutas y cocaína, no había testigos y podía hacerlo pasar por accidentes”.

Sobre la introducción de rocas de cocaína en la vagina y el ano de las víctimas, el Ministerio Fiscal afirmó que, aunque no le gusta utilizar expresiones del ámbito político, el “no es no” es válido en este caso, porque lo que hacía no era una “fiesta blanca” sino un juego sexual que “le debía llenar” pero que causó “perjuicio, y mucho”, a muchas de las mujeres.

Según la fiscal, en noviembre de 2019, cuando desapareció Marta Calvo -cuyo cuerpo aún no se ha hallado-, la Policía ya estaba investigando las muertes de las otras dos chicas pero él lo desconocía y acabó entregándose veintiún días después por el desmembramiento del cuerpo de Marta, cuyo fallecimiento se produjo en su casa de Manuel (Valencia) y él descubrió al despertar, según su declaración.

No se creen el descuartizamiento

Descartó que Palma descuartizara el cuerpo de Marta Calvo, como él confesó tanto cuando se entregó a la Guardia Civil como en el juicio, al no haberse encontrado ningún vestigio en la inspección del baño y de la casa ni tampoco en las plantas de residuos donde llega el contenido de los contenedores (de Alzira y Silla) donde confesó haber tirado el cadáver desmembrado en bolsas.

La ausencia de pruebas objetivas que demuestren el descuartizamiento de Marta Calvo también ha fue argumentado por la acusación de la madre de la joven, Marisol Burón, que expuso las condenas anteriores de Palma en Italia y Pamplona por narcotráfico y su alto nivel de vida sin trabajo, permiso de residencia ni pasaporte.

Respecto a la muerte de Arliene Ramos, la fiscal ha señaló que el análisis toxicológico ofreció una pureza del 81,6 por ciento en la cocaína que había en la estancia donde estaban ambos, y sobre Lady Marcela Vargas, la causa de la muerte fue sobredosis de cocaína en estado puro y asfixia y se encontró ADN del acusado en sus uñas.

La acusación que representa a la madre de Marta Calvo se refirió a Palma como “un asesino en serie”, peligroso para los demás, y aseguró que ha tratado de manipular a todos con la teoría del propio suicidio. Desde la representación del padre de la joven, se afirmó que la “fiesta blanca” era el cebo utilizado y que él simulaba que consumía pero no lo hacía.