Ximo Puig mueve ficha para tratar de frenar el recorte del Tajo- Segura

Si es necesario, la Generalitat valenciana llegará a los tribunales para defender el mantenimiento del trasvase Tajo- Segura.Así lo aseguró el presidente Ximo Puig ante los empresarios que llenaron el auditorio de la EUIPO durante la Noche de la Economía de Alicante.

Sería la última opción, eso sí, porque significaría que un Gobierno socialista ha vuelto a fallar en uno de los asuntos que más molesta a los valencianos, la falta de agua.

De momento, y mientras la oposición exige a la Generalitat que dé pasos en firme para frenar el último acuerdo del Consejo Nacional del Agua, la Abogacía de la Generalitat, ha elaborado un informe en el que «desmonta los argumentos esgrimidos para tratar de justificar un cambio de última hora en relación a los criterios para fijar los caudales ecológicos». Se refiere a los argumentos en los que el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, defendió para argumentar que la cantidad trasvasada se tendrá que reducir, independientemente de la actuaciones que se lleven a cabo en la cuenca.

Morán, político de profesión y que, según el currículum publicado en la web de Transparencia del Ministerio tiene «estudios de Derecho» con formación académica, afirma que el recorte es inevitable porque así está recogido en cinco sentencias del Tribunal Supremo. Con esta argumentación la reducción del caudal que llegaría a Alicante y a la Región de Murcia estaría asegurada aunque se cumplan las 169 medidas que recoge el denominado programa de vigilancia del Tajo-Segura, documento en el que se había basado la Generalitat para mostrarse moderadamente satisfecha por el acuerdo alcanzado en el Consejo Nacional del Agua.

La Abogacía concluye que, tras analizar la doctrina emitida al respecto por el Alto Tribunal, «en ningún momento el Supremo se pronuncia sobre el aumento de los caudales ecológicos, sino que únicamente señala que hay que fijarlos».

El presidente Puig se pronunció ayer sobre esta cuestión y dijo que «el diálogo es la vía para conseguir el éxito», que a su juicio consiste en «ni más ni menos que lo imprescindible, que el trasvase siga vigente, pero también que se avance en la capacidad de disponer de todos los recursos disponibles, agua para siempre».

Aunque en tono conciliador, Puig se mostró firme. «No se puede entender que se rompa un acuerdo, la Generalitat no está dispuesta a eso. La Abogacía ha hecho un informe en el que se refrenda que no hay ningún motivo que haga razonable un cambio de posición respecto a aquello que se acordó legítimamente en el Consejo del Agua».

«Cortinas de humo»

Las explicaciones no han satisfecho al PP. Su portavoz adjunto en Les Corts Miguel Barrachina instó al presidente Puig a dejar de lanzar cortinas de humo en materia de agua y decir la verdad: «El Gobierno del PSOE es quien va a recortar un 50 por ciento del agua -del trasvase Tajo-segura- con su complacencia».

El diputado popular recordó que la representante de la Generalitat se abstuvo en la reunión del Consejo Nacional del Agua de hace apenas dos semanas, mientras todos los representantes del PP y de los regantes y agricultores estuvieron en contra de romper el acuerdo histórico de 2013.

«La Generalitat hizo el ridículo en el Consejo Nacional del Agua» porque «no se puede amagar con que estás en contra y, a la vez, abstenerte ante un recorte que a partir del mes que viene será de un 20 por ciento y en el plazo de tres años, hasta un 50».

Además, recordó que que el pasado lunes en la comisión de Medio Ambiente de Les Corts, el PSPV hizo una propuesta para manifestarse a favor de la propuesta del Consejo Nacional del Agua.

«En una semana ha pasado de abstenerse a estar a favor de romper consensos históricos». Por este motivo, instó al PSPV a presentar una propuesta seria en Les Corts, para mantener el trasvase en los términos actuales, una propuesta similar a la que ya planteó el PPCV y que votaron en contra».