Medio Ambiente

Sarna, tuberculosis y peste porcina: el aumento de la fauna salvaje dispara las enfermedades entre la ganadería valenciana

Los agricultores denuncian pérdidas de 40 millones de euros debido a la presencia de animales sin control

Imagen de archivo de un jabalí
Imagen de archivo de un jabalíJUNTA DE ANDALUCÍAJUNTA DE ANDALUCÍA

Las cada vez mayores restricciones a la caza en la Comunidad Valenciana y el abandono de campos, están provocando un incremento de la presencia de animales salvajes que deambulan por campos y granjas sin ningún tipo de control y que están provocando graves daños a la agricultura y ganadería. Así lo denunciaba esta semana la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA) que aseguraba que uno de los problemas más graves es la transmisión de enfermedades entre la fauna salvaje y la ganadería extensiva.

Desde la organización explicaron que, principalmente en la provincia de Castellón, lascabras montesas y arruís transmiten enfermedades como la sarna y la tuberculosis a la ganadería extensiva, enfermedades que no han dejado de propagarse por la falta de control poblacional. En otros países europeos los jabalíes ya están expandiendo además la peste porcina africana. También los conejos, cada vez más abundantes en las zonas de cultivo colindantes con la vía del AVE Madrid-Valencia, son transmisores de enfermedades.

Además, en ganadería los buitres atacan a vacas vivas y terneros, coincidiendo con la época de parto, en las ganaderías del interior de Valencia y Castellón.

Pérdidas millonarias

Convertido en un problema cada vez más grave y fuera de control, el exceso de fauna salvaje provocó en 2022 unas pérdidas de 40 millones de euros, un 15 por ciento más respecto al año anterior. Los tipos de daños más comunes son los destrozos en cultivos e infraestructuras agrarias, la transmisión de enfermedades ya mencionada e, incluso, accidentes de tráfico y ataques a personas. En este sentido, AVA-Asaja reclama una legislación nacional y autonómica para el control poblacional del jabalí y las otras especies de fauna silvestre, a través de la caza y otras actuaciones que deberían ser gestionadas de manera ágil, sencilla y eficaz.

El jabalí “ya ha perdido el miedo”, explican desde la organización.Se trata del animal silvestre que más daños causa: tumba y arranca árboles jóvenes buscando la humedad de las raíces, rompe gomas de goteo, causa socavones, destroza muros e infraestructuras agrarias y devora cítricos, almendras que aún están verdes, maíz, hortalizas, frutas, melones, etc.

Los conejos roen los troncos de los naranjos, las viñas y los frutales, hasta el extremo de provocar la muerte de arbolado, y su presencia es mayor junto a las vías del AVE Valencia-Madrid. En el parque natural de La Albufera, los patos se comen las semillas del arroz y las bandadas de flamencos pisotean campos enteros.

La superpoblación de fauna salvaje excede la actividad agraria y ya supone un problema para el conjunto de la sociedad. Según la Generalitat, causa más de 300 accidentes de tráfico al año. Además, provoca crecientes desperfectos en urbanizaciones y centros urbanos de todo el territorio. Hay casos deataques a agricultores y bañistas como sucedió en una playa de Alfàs del Pi, quien tuvo que ser atendida por los servicios médicos por un corte en la pierna.