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La amnistía y los acuerdos de investidura del PSOE incendian el ambiente en Les Corts

Llanos Massó (Vox) vuelve al lenguaje soez: "esto qué coño es. Hostia, esto es tremendo"

La amnistía y los acuerdos de investidura del PSOE incendian el ambiente en Les Corts
La amnistía y los acuerdos de investidura del PSOE incendian el ambiente en Les CortsCorts Valencianes

La amnistía y los pactos de gobierno del PSOE con los independentistas catalanes para la investidura de Pedro Sánchez han incendiado los ánimos este miércoles del pleno de Les Corts Valencianes, en un debate que ha acabado con el abandono de los escaños por parte de los diputados de Compromís.

Les Corts han celebrado este miércoles, a propuesta de Vox, un pleno sobre las "consecuencias y posibles perjuicios" para la Comunitat Valenciana de los acuerdos de investidura de Sánchez como presidente del Gobierno, "como la ley de amnistía y la condonación de parte de la deuda a Cataluña".

El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, ha abierto el debate con una intervención en la que se ha negado "a recoger las migajas de lo que otros consiguen con el chantaje", y ha advertido de que esos pactos no saldrán bien y tendrán efectos "sobre la convivencia, la estabilidad y nuestro desarrollo social".

"Cualquier decisión habrá de ser validada por el separatismo y la estabilidad de la legislatura queda sujeta a las negociaciones para un referéndum de autodeterminación", ha augurado.

Si la Dama de Elche lo fuera de Llobregat

Mazón se ha mostrado especialmente crítico con la cesión del parque inmobiliario del Gobierno a la Generalitat de Cataluña: "Es el caso de los edificios de Correos. Lo que a los valencianos nos costó decenas de millones, al separatismo le va a salir gratis", y ha añadido: "Si la Dama de Elche se llamase Dama del Llobregat ya habría informes técnicos que avalarían su vuelta" desde Madrid. Además, ha pedido el regreso a Orihuela del Llibre del Repartiment -un texto del siglo XIII donde se anotaban las promesas de donación de propiedades cuando se terminara la conquista de Valencia por parte de Jaime I, que se conserva en el Archivo de la Corona de Aragón, en Barcelona- y ha espetado: "No sé qué demonios hace aún en Cataluña". Igualmente, Mazón ha lamentado que "la política de costas, los trasvases, la vivienda, la ampliación del Puerto... lo decidirán otros, será autorizado en un proceso de verificación en el extranjero por un mediador ajeno a España. Eso incumple la Constitución y no saldrá bien, tendrá efectos sobre la convivencia, la estabilidad y nuestro desarrollo social".

"Digámoslo ya, el Gobierno de Sánchez ha renunciado a gobernar con igualdad. Cualquier decisión habrá de ser validada por el separatismo y la estabilidad de la legislatura queda sujeta a las negociaciones para un referéndum de autodeterminación", ha augurado.

Tras condenar en varias ocasiones las manifestaciones violentas, Mazón ha preguntado a la bancada socialista: "¿Creían que la gente no reaccionaría? Ha habido una reacción espontánea que va más allá de los partidos y siglas, porque este acuerdo no era preciso y no hay ambición que lo justifique".

El ambiente ha ido subiendo de tono, especialmente con el discurso de la síndica de Vox, Ana Vega, quien ha señalado al PSOE como "artífice de un golpe de Estado" por los pactos alcanzados, y a Compromís, como "muletilla ridícula del PSOE y felpudo de los separatistas catalanes".

La síndica del PSPV-PSOE, Rebeca Torró, ha pedido que esas acusaciones fueran borradas del diario de sesiones, algo que ha rechazado Ana Vega, por lo que la presidenta de Les Corts, Llanos Massó (también de Vox), ha decidido mantenerlas alegando que la ciudadanía "tiene derecho a saber lo que ha dicho cada uno en el hemiciclo".

En el transcurso del debate, varios diputados de la oposición han pedido la palabra por diferentes alusiones, pero la presidenta de la Cámara ha denegado todas las solicitudes, excepto la de la diputada del PP Beatriz Gascó, quien ha replicado al síndic de Compromís, Joan Baldoví, que no existe ninguna sentencia en su contra, tal y como él había planteado.

Esto ha provocado un gran enfado en la bancada de Compromís, cuyos diputados han abandonado el hemiciclo, pues a su parlamentario Juan Bordera no le habían dejado previamente responder al síndic del PP, Miguel Barrachina, que había mostrado una noticia en la que se dice que Bordera se enfrenta a una pena de cárcel por atacar el Congreso.

Por lo que se refiere al debate, la síndica socialista ha acusado a Mazón de usar esta institución como "instrumento partidista" y de ser el "adalid de la crispación, el odio y la irresponsabilidad".

"No les molestan ni la amnistía ni los pactos, les molesta que volvamos a tener un Gobierno progresista", ha asegurado Torró, quien ha defendido que el derecho de gracia está amparado en la Constitución, y ha pedido al PP que frene la campaña de señalamiento a diputados socialistas por votar a favor de la investidura.

La dirigente socialista ha asegurado que tras las agresiones en la Comunitat Valenciana hay un nombre, el de Carlos Mazón, y le ha advertido de que "si pasa algo más grave, tendrá muy difícil justificarse".

En su réplica, Mazón ha afirmado que el nombre de los diputados que votaron la investidura sale en varios medios de comunicación y está también en el diario de sesiones del Congreso, y ha preguntado al PSPV si va a demandar también al diario de sesiones.

Mazón ha insistido en que no le parecen bien y no respalda que se hagan manifestaciones ante las sede de los partidos, y ha aprovechado para denunciar también la vejación a su vicepresidente, Vicente Barrera (Vox), cuya imagen fue pisoteada este martes por personas que protestaban por la destitución del director del Centre del Carme, José Luis Pérez Pont.

Por su parte, el síndic de Compromís ha asegurado que ni España se ha roto ni se ha producido un golpe de Estado, y ha señalado que si se quiere hablar de amnistía, que se hable de la amnistía fiscal del PP que el Tribunal Constitucional declaró nula en 2017 o de la que pidieron 45 diputados del PP para Pedro Hernández Mateo, condenado por corrupción.

En su segunda intervención, el presidente de la Generalitat ha lamentado la "peligrosa deriva frentista que contagia al país" y frente a eso, ha anunciado una "ronda de diálogo" con los grupos parlamentarios para "unir esfuerzos" en cuestiones como los Presupuestos Generales del Estado, la renovación de organismos estatutarios, el agua o el Derecho civil valenciano.

Pero desde la oposición no han recogido el guante. Rebeca Torró le ha reprochado que "primero tira la gasolina y lo incendia todo y luego viene de bombero", y Joan Baldoví ha criticado que venga "imbuido del espíritu navideño, pero que no cuela".

Otro exabrupto de Massó

Y lejos de tranquilizar el ambiente, un micro abierto ha vuelto a amplificar un exabrupto de la presidenta de Les Corts, Llanos Massó (Vox) quien ha preguntado "¿pero esto qué coño es?" al detectar un fallo en la votación de unas enmiendas. Y a continuación ha dicho "hostia, esto es tremendo". No es la primera vez que esto le sucede ya que en el pleno del lunes se le oyó decir: "Vamos a votar a mano alzada y que les den por saco".

Tras el debate de las enmiendas de totalidad a la ley de acompañamiento a los presupuestos de la Generalitat para 2024, la presidenta de Les Corts ha anunciado que se iba a pasar a la votación, y tras revisar el sistema técnico se le ha oído afirmar: "¿pero esto qué coño es?".

Los socialistas han pedido este miércoles la reprobación de Massó "por su falta de respeto a todos los diputados", según ha señalado la síndica del PSPV-PSOE, Rebeca Torró, quien ha considerado que la presidenta de Les Corts "no se comporta con la dignidad que merece su cargo".

Por su parte, el síndic de Compromís, Joan Baldoví, consideró este martes que la expresión "a tomar por saco" es "impropia" del cargo que representa Massó y "desafortunada en el marco de Les Corts, que representan a cinco millones de valencianos".