Medio Ambiente busca cómo controlar la invasión de las "cabras acróbatas" de este pueblo de Castellón

Salir a pasear y ver cabras saltando de tejado en tejado. Es la escena a la que empiezan a acostumbrarse los vecinos de esta localidad de Castellón, que se ha pasado de ser famosa por tener uno de la rutas más populares de la provincia- conocido como la Vuelta de la Hoz- a ser la protagonista de una de las estampas más sorprendentes del mundo rural.

Se trata de la población de Jérica. Situada en la comarca del Alto Palancia- y a menos de una hora de Valencia- destaca también por su rico patrimonio cultural, como la Torre Mudéjar de las Campanas y los restos del castillo.

Sin embargo, desde hace un tiempo sus 1.800 habitantes se han tenido que acostumbrar a convivir con las cabras montesas. Campan a sus anchas por el pueblo y claro está, la cabra tira al monte y recorren el municipio no solo saltando de tejado en tejado, sino también paseando a sus anchas por las calles.

Desde el servicio de Caza y Pesca de la dirección general de Medio Natural y Animal de la Conselleria de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio se está haciendo un seguimiento a la población de cabras montesas en la comarca del Alto Palancia, donde hay una población estable de unos 1.100 ejemplares.

En el marco de actuaciones para controlar la población, en el término municipal de Jérica se concedió el primer permiso de caza durante la temporada 2023-2024. Durante este año, además, se ha autorizado un cupo mayor de capturas.

De la misma forma, en el marco del decreto de ungulados que se está tramitando y se prevé aprobar este verano se dotarán las herramientas para aumentar cupos de caza y realizar otras actuaciones para combatir la sobrepoblación.