Fiestas

Cremá 2023: Valencia se quema en unas Fallas de récord

La edición más multitudinaria de la historia afianza una fiesta que quedó apagada por la pandemia, pero que atraviesa un momento de plenitud que deja numerosos retos para no morir de éxito

Como el corazón de El Fallero, el pasodoble que compuso el maestro Serrano, Valencia se ha quedado esta noche de San José «amb el cor encés en flama» - con el corazón encendido en llamas-. La ciudad cerró unas Fallas de récord con la Cremá del monumento de la plaza del Ayuntamiento, «Cardioversió valenciana» de Manolo García y Marina Puche, un enorme corazón que ha gustado a todos.

Si la famosa figura de «la meditadora» de 2020 tuvo un lema que se convirtió en premonición, «esto también pasará», el monumento de este año evocaba los colores de la vida después de los últimos años oscuros.

Y esto ha ocurrido. Las primeras cifras apuntan a que se ha superado el millón de visitantes. Además, el hecho de que este lunes sea festivo en Madrid ha hecho que la estación Joaquín Sorolla haya sido uno de los puntos con más movimiento de la ciudad. Estaba complicado porque el «cap i casal» ha colgado el cartel de completo.

Las de 2023 no solo quedarán registradas por ser las fallas más numerosas en visitantes, sino también por haber logrado récord de asistentes a una mascletá. El Ayuntamiento de Valencia apunta a que hasta 170.000 personas se han congregado para ver los disparos de este fin de semana. También ha habido máximos históricos en la Ofrenda a la Virgen de los Desamparados, se calcula que han desfilado 100.000 falleros, confirmando así que las comisiones viven un excelente momento. Por último, ha habido récord de buen tiempo. No se recordaban unas fiestas sin que la amenaza de lluvia tuviese angustiado a los falleros.

Destacable también ha sido el desfile de políticos. El PP ha sido el ganador absoluto, pues el líder nacional Alberto Núñez Feijóo visitó varios casales la noche de la Plantá y vio, por segundo año consecutivo, un disparo acompañado por el presidente del PPCV, Carlos Mazón, y la secretaria general, María José Catalá.

El gran ausente ha sido el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que pese a asistir el viernes al acto de la primera piedra de la gigafactoría de Volkswagen, no guardó hueco en su agenda para asistir a una mascletá. Sí lo hicieron otros ministros socialistas como la de Ciencia, natural de Gandia, Diana Morant o el de Seguridad Social, José Luis Escrivá. Por parte de Podemos, lo hizo la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra y la de Igualdad, Irene Montero.

Este lunes solo quedarán restos que los equipos de limpieza no hayan podido recoger. Porque así son las Fallas. Por increíble que le parezca al visitante, se queman y es esto, precisamente lo que les da singularidad. Siempre hay que volver a empezar.

Las llamas consumieron ayer los monumentos falleros. La Junta Central Fallera decidió mantener el horario que se marcó con la pandemia, momento en el que se adelantó la Cremá para cumplir con las restricciones.

A las ocho de la tarde han comenzado a arder las infantiles, a partir de ahí y durante cinco horas arderán todas las de la ciudad. La penúltima, la ganadora del primer premio, la Falla Exposición-Micer Mascó y, para concluir la de la Falla del Ayuntamiento.

Hoy, día de resaca y de balance, se darán las cifras exactas del impacto que han tenido estas fiestas en la ciudad. El gran número de asistentes ha aumentado las quejas de los vecinos, sobre todo los del centro y de Russafa, que han fotografiado las montañas de basura con las que se han encontrado cada mañana.

Preguntado por esta cuestión, el alcalde de Valencia, Joan Ribó, ha reconocido algunos problemas «puntuales por falta de limpieza o de urinarios».

También hizo una evaluación positiva de algunas de las novedades de esta edición de Fallas, como los conciertos en La Alameda o el cambio de ubicación de la Nit del Foc. Sobre la Ofrenda, respondió con un clásico, «habrá que repensar los horarios» para evitar que la fallera mayor de Valencia entre en la plaza más tarde de la una de la madrugada.