Economía

La deuda "desorbitada" del Botànic costará más de 2.100 millones de euros en intereses hasta 2025

La consellera de Hacienda advierte de que la situación financiera valenciana "requiere de atención inmediata"

La consellera de Hacienda, Economía y Administración Pública, Ruth Merino, esta tarde en Les Corts
La consellera de Hacienda, Economía y Administración Pública, Ruth Merino, esta tarde en Les CortsLa Razón

La situación financiera de la Comunidad Valenciana, con más de 52.000 millones de deuda y un déficit de más de 1.800 millones de euros solo durante el primer semestre de este año, es "precaria" y "requiere de atención inmediata". Así lo señaló ayer por la tarde la consellera de Hacienda, Economía y Administración Pública, Ruth Merino, durante su intervención en Les Corts para establecer sus líneas de trabajo para la próximo legislatura. "Hay que tener en cuenta el punto de partida en el que nos encontramos", señaló, para detallar cómo el "efecto bola de nieve" de la creciente deuda valenciana ha provocado un elevado gasto financiero en intereses que ascenderá durante este año a los 500 millones de euros y llegará a los casi 1.000 millones de euros dentro de dos años.

De hecho, según el informe elaborado por Fedea sobre la estimación del gasto autonómico en intereses para los próximos años, el gasto financiero de la Generalitat valenciana será este año de 476 millones de euros, una cifra que seguirá creciendo hasta los 679 millones de euros en 2024 y que llegará a los 970 millones de euros en 2025, es decir, un total de 2.125 millones de euros en concepto de intereses en solo dos años.

El incremento de la deuda pública junto con la subida de los tipos de interés provocará, según este informe, que la variación en el gasto financiero de la Generalitat valenciana desde 2022 hasta 2026 sea de 985 millones de euros.

La propia Fedea advierte de que "el aumento significativo del coste financiero de la deuda puede obligar a redireccionar recursos crecientes desde otras políticas públicas al servicio de la deuda, circunstacia poco óptima y menos deseable".

"Pensar que el crecimeinto de la deuda no tiene efectos, es una temeridad"

"Pensar que el crecimiento de la deuda no tiene efectos, es una temeridad", señaló la consellera, como crítica a la gestión de sus predecesores del Consell del Botànic. Por ello, explicó, la gestión del actual Consell se basará en reducir el "gasto superfluo", en llevar a cabo "una reforma fiscal para todos" y en mejorar la gestión.

Parte de estas medidas ya se han empezado a aplicar, como la supresión del "impuesto a la muerte", en referencia al de Sucesiones y Donaciones, y otras tantas se empezarán a ver reflejadas en la Ley de Presupuestos de la Generalitat valenciana de 2024, un documento que, aunque se presentará en "tiempo y forma", se realizará en base a "estimaciones" ya que el Gobierno central no ha remitido al valenciano los datos básicos necesarios, como la liquidación tributaria correspondiente al año 2022.

En referencia a la elaboración de las cuentas para el próximo año, Merino subrayó que "no dispararemos con pólvora de rey" y que serán "reales y responsables". Como medidas adiciones a la mejora de la gestión y la efieciencia de los gastos y los ingresos, explicó que se llevará a cabo un análisis del patrimonio público valenciano, para optimizar su uso y su capacidad de generar ingresos, y se seguirá luchando contra la economía sumergida.

Para reequilibrar las cuentas públicas valencianas, señaló la consellera, es imprescindible "renovar el sistema de financiación autonómica" y en este sentido aseguró que "este Consell no cejará en el empeño de instar al Gobierno" a que lleve a cabo dicha reforma. "Esta cuestión es fundamental para resolver los problemas de cada área, es prioritario reclamar de forma contundente la reforma del sistema de financiación para reclamar los recursos que por derecho nos corresponden".

Añadió además que la Comunidad Valenciana "no será moneda de cambio" en las negociaciones entre el Gobierno central y los independentistas y que la Generalitat planteará sus demandas en el escenario oportuno, es decir, el Consejo de Política Fiscal y Financiera, «sin cuartos oscuros y sin traiciones, pero siendo muy firmes y sin servidumbres ni excusas».