Educación
El examen de Matemáticas II de la EBAU 2024 en Valencia, "se puede sacar un 10 sabiéndote la mitad del temario"
Los alumnos pueden resolver los problemas de geometría y álgebra sin necesidad de enfrentarse a los más complejos, que son los de cálculo y probabilidad
El examen de Matemáticas II no generará polémica entre los alumnos. Hay que remontarse a 2019 para encontrar un examen por el que haya habido quejas masivas. El sindicato de estudiantes llegó, sin éxito, a solicitar su anulación alegando que se preguntó por materias que no se habían impartido.
El catedrático de Matemática Aplicada de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV), Samuel Morillas, explica a LA RAZÓN que el principal cambio con respecto a convocatorias anteriores es que en el temario ha entrado un cuarto bloque, antes solo eran tres.
«Hay un bloque de geometría, álgebra, cálculo y otro último de probabilidad, que es el nuevo». Hasta aquí todo normal, pero Morillas incide en una cuestión. «El problema es que el modelo de examen es un menú del día, te proponen ocho problemas y puedes hacer cuatro, cualquiera de esos ocho. De forma que sabiéndote la mitad del temario puedes sacar un 10».
Como ejemplo dice que el alumno que elija las dos preguntas de geometría y las dos de álgebra, que es lo que los alumnos suelen hacer, aprobará. «Es decir, sabiendo un 25% del temario».
La cuestión que destaca Morillas, secretario del tribunal 27 que tiene la sede en la ETS Arquitectura, es que los alumnos que son muy buenos y que dominan todo el temario no destacan frente al que se sabe solo el 50 por ciento. «Pueden elegir problemas que son muy mecanizados en los que se requiere poco razonamiento».
En el examen de la convocatoria de este año de la PAU, los problemas más difíciles son los de cálculo. «Imagino que esas preguntas las va a responder poca gente porque son más complejas y requieren de razonamiento y capacidad de cálculo», es decir, «son un poco más abstractos que los otros ejercicios».
Apunta además que las preguntas de probabilidad tampoco tienen una gran complejidad, pues son bastante mecánicas.
En todas las autonomías no se utiliza el mismo método. Como ejemplo, Morillas pone Andalucía donde hay cuatro bloques de dos preguntas, pero se tiene que hacer una pregunta de cada uno de ellos, de manera que no se puede esquivar la mitad de los contenidos.
Historia de Matemáticas II
Si en 2019 hubo muchas quejas, el examen de 2020, en pleno covid, fue fácil, pero menos que en 2021. Sin embargo, el de 2022, sí tuvo dificultad, permitiendo así "clasificar mejor al alumnado según su nivel y especialmente distinguir a los alumnos excelentes de los demás”, explicó entonces Morillas. Aquel año no salió una materia que se daba por segura, los ejercicios relacionados con sistema de ecuaciones, como por ejemplo su discusión en función de un parámetro. Además, también se planteó un problema para el que era necesario razonar antes de llegar a la parte analítica. En el análisis que Morillas realizó a LA RAZÓN, admitió que había algunos apartados de una complejidad mayor a la habitual.
A partir de 2023 es cuando se diseñó el sistema actual de bloques que permite aprobar el examen sin haber estudiado toda la materia.
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