El nuevo presidente del Puerto de Valencia: "No es el momento del desarrollismo"

La ampliación del Puerto de Valencia es, seguramente, uno de los temas que más conflicto ha generado entre los socios de Gobierno PSPV y Compromís no solo durante la actual legislatura sino también en la anterior. Los nacionalistas se han mostrado desde siempre absolutamente en contra de unas obras que consideran un atentado contra el medio ambiente, mientras que los socialistas han estado del lado de los empresarios, defendiendo que la importancia económica del recinto es tal que la ampliación es más que necesaria.

El hasta ahora presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV), Aurelio Martínez, se ha mostrado siempre muy claro con respecto a este asunto, defendiendo a capa y espada unas obras que obtuvieron la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) en el año 2007, por lo que los de Compromís consideran que está obsoleta y sería necesaria una nueva.

Pero el nuevo dirigente de la institución, Joan Calabuig, se ha mostrado hoy durante su toma de posesión mucho más cercano a buscar un entente con sus adversarios. «Lo primero es la sostenibilidad, no es la época del desarrollismo», ha dicho, dejando entrever que están dispuestos a llegar a una tregua con respecto a este asunto.

«Ha habido y hay muchos espacios para el acuerdo, sin maximalismos pero desde la convicción de que nadie tiene toda la razón y todos tiene algo de razón y a todos hay que escuchar», ha defendido el nuevo presiente de la Autoridad Portuaria.

Calabuig ha apostado por seguir consolidando el Puerto de Valencia «como uno de los más importantes de Europa, ofreciendo confianza, estabilidad y seguridad, como se ha hecho en los últimos años, y por avanzar en el desafío de la transformación digital, donde el puerto», dice, no será «un observador pasivo» sino «un impulsor decidido».

Además, ha destacado el objetivo de convertir a esta infraestructura en «el puerto más sostenible de Europa», apostando por la descarbonización, el uso de las energías renovables y por las conexiones ferroviarias.

No obstante, Calabuig ha advertido de que todos estos avances solo serán posibles «en un entorno de dialogo, de consenso y de futuro compartido», en el que, según ha destacado, «todos tenemos una gran responsabilidad y no cabe la frivolidad».

Por ahora, la futura ampliación del Puerto está en manos del Gobierno central, que anunció a finales del pasado mes de marzo que aprobará las obras en Consejo de Ministros sin esperar a que se resuelva el litigio judicial por el cual se suspendió cautelarmente la condición de órgano sustantivo de la Autoridad Portuaria (APV), lo que le permitía decidir que no era necesaria una nueva declaración de impacto ambiental (DIA)