Hacienda

Mazón acaba con los 1.300 millones «ficticios» del Botànic en los Presupuestos

La consellera de Hacienda defiende que serán unas cuentas «rigurosas», elaboradas con «responsabilidad» y que se presentarán en tiempo y forma

La portavoz del Consell, Ruth Merino
La consellera de Hacienda y portavoz del Consell, Ruth MerinoGeneralitat Valenciana

El año 2015 fue el primero en el que los Presupuestos de la Generalitat valenciana incluyeron una partida de 1.300 millones de euros en concepto de unos ingresos que no estaban asegurados. En aquella ocasión fue un conseller de Hacienda del PP, Juan Carlos Moragues, quien decidió incluir dicha partida, puesto que se encontraba en plenas negociaciones con el Gobierno central -entonces en manos de Mariano Rajoy- para incrementar las entregas a cuenta a la Comunitat Valenciana, y confiaba en salir vencedor.

El año siguiente, en los presupuestos para 2016, el recién estrenado el Gobierno del Botànic -PSPV y Compromís con el apoyo de Podem- decidió seguir la estela de sus antecesores y mantener aquellos 1.300 millones de euros «ficiticios», solo que se les apodó con el adjetivo de «reivindicativos».

La idea era que, puesto que el sistema de financiación autonómica es injusto con la Comunitat y no concede a la región el dinero que le corresponde, el Consell incluía esta partida irreal -que se gastaba y se acumulaba en la deuda- en concepto de la financiación estatal que se debería recibir.

Durante estos ocho años de legislatura de izquierdas, desde el PP se ha criticado duramente la inclusión de esta cantidad «ficticia» que, según ellos, engordaba la deuda pública de la Comunitat y construía unas cuentas inexistentes.

Por ello, el nuevo Gobierno de Carlos Mazón eliminará dicha partida en los Presupuestos de 2024. Así lo anunció ayer la consellera de Hacienda, Economía y Administración Pública, Ruth Merino (PP), durante una entrevista en À Punt, en la que defendió que las cuentas del año que viene estarán basadas en la «rigurosidad» y en la «responsabilidad».

Preguntada por cómo se suplirá esta bajada de ingresos, que se suma a la reforma fiscal anunciada por Carlos Mazón, la consellera explicó que hay diferentes formas, siendo una de ellas la reactivación económica que se produce al reducir o suprimir ciertos impuestos, como el de Sucesiones y Donaciones.

Merino aseguró que todos los miembros del Consell, tanto del PP como de Vox, se encuentran en la misma línea de cara a la preparación de las cuentas de sus departamentos. Preguntada por si el actual Gobierno mantendrá la comisión mixta de elaboración de los presupuestos -inaugurada por el Botànic, a instancias de Compromís, para poder participar también en la redacción de las cuentas- Merino aseguró que «nada de comisiones». Los presupuestos son una responsabilidad de la Conselleria de Hacienda que, por supuesto, mantendrá las reuniones que sean necesarias con el resto de Consellerias para conocer sus necesidades.

Por otra parte, la consellera se mostró convencida de que las cuentas serán presentadas «en tiempo y forma». «Existe una gran armonía entre todos los miembros del Consell», aseguró.

Merino anticipó que a lo largo de las próximas semanas el Consell seguirá la línea de los recortes iniciada a finales del mes de julio para adelgazar la administración y bajar el gasto político. Después de haber reducido los cargos en el segundo y tercer escalón, ahora es el turno de los asesores y del personal eventual, y a continuación será el momento del sector público.