Un millón de cerdos valencianos, bajo la minuciosa lupa de la República China

La guerra comercial que desde hace meses mantienen la Unión Europea y China a raíz de la intención de los primeros de imponer severos aranceles a la importación de vehículos eléctricos puede generar efectos colaterales negativos en las importaciones de carne de cerdo española que el gigante asiático realiza.

El Ministerio de Comercio de la República Popular China ha anunciado la apertura de una investigación contra el dumping con respecto a las importaciones de carne de cerdo y subproductos porcinos relevantes procedentes de los países miembros de la Unión Europea. El objeto de dicha investigación son los productos importados en 2023 y los daños que estas compras provocaron al sector chino entre 2020 y 2023.

Esta medida anunciada por parte de China no es más que la respuesta a los aranceles anunciados por Bruselas a los vehículos eléctricos chinos, de los que se sospecha que están fuertemente subvencionados y se venden a precios artificialmente bajos. De este modo, el sector ganadero porcino se sitúa en un fuego cruzado por las disputas comerciales relativas a otros sectores.

Según datos de la patronal del sector, Interporc, España exportó en 2023 más de 560.000 toneladas de porcino a China por valor de más de 1.200 millones de euros, lo que representa uno de cada cinco kilogramos de carne de cerdo que exporta el país. Además, casi el 21 por ciento de las importaciones de cerdo totales de China proceden de España.

En la Comunitat Valenciana se ubican numerosas explotaciones porcinas: 450 granjas y 640.000 cerdos solamente en la provincia de Castellón. Este sector es de vital importancia en comarcas como La Plana Alta, El Baix Maestrat o Els Ports.

Por su parte, en la provincia de Valencia se ubican explotaciones ganaderas que, en su conjunto, cuentan con un total de 374.000 cerdos, así como 58.000 en la provincia de Alicante.

Los países de la UE, que están divididos sobre la conveniencia de los aranceles a los vehículos eléctricos, podrían pronunciarse sobre la medida en una votación vinculante el próximo 30 de septiembre, según dijeron a EFE fuentes diplomáticas, que puntualizaron, no obstante, que la fecha no está completamente cerrada. Y es que según el reglamento comunitario, hay margen hasta finales de octubre para celebrar la votación.

Francia e Italia lideran los países favorables a la aplicación de los aranceles, mientras que el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, se unió esta semana a su homólogo alemán, Olaf Scholz, cuando durante un viaje oficial a China pidió a Bruselas que reconsidere su posición, pese a que en una votación no vinculante a mediados de julio se mostró favorable a los aranceles

En ese sentido, el conseller de Agricultura de la Generalitat Valenciana, Miguel Barrachina explicó a LA RAZÓN que «es la debilidad del Gobierno de Pedro Sánchez la que va a hacer que sean nuestros productores de porcino valenciano y español los que paguen la subida de los aranceles a los coches eléctricos chinos. Sucede igual como con nuestros pescadores cuando se les reducen los días de faena, o como con nuestros agricultores que ven como entran por nuestras fronteras productos tratados con fitosanitarios prohibidos aquí. Por lo tanto, Pedro Sánchez debe ejercer como presidente del Gobierno de España y defender a nuestros agricultores, ganaderos y pescadores».

También desde el PP se ha presentado una proposición no de ley en Les Corts Valencianes en las que se reclama al Consell para que, a su vez, inste al Gobierno de España a liderar el apoyo y la defensa ante las instituciones de la Unión Europea de los productos de nuestro sector ganadero porcino frente a la investigación antidumping china, y garantizar que la investigación cumpla plenamente todas las normas pertinentes de la Organización Mundial del Comercio.

La guerra de Ucrania como telón de fondo

El vicepresidente de la Comisión Europea (CE) y responsable de Comercio, Valdis Dombrovskis, defendió este jueves en una reunión con el ministro de Comercio chino, Wang Wentao, la investigación que ha llevado a Bruselas a imponer aranceles a los coches eléctricos, si bien ambos acordaron «intensificar los esfuerzos» para encontrar una solución. Más allá de la cuestión de los vehículos eléctricos, Dombrovskis trasladó a Wang «las preocupaciones crecientes» de la UE sobre el papel que está jugando China en la guerra contra Ucrania, en relación a la evasión de las sanciones que los Veintisiete han impuesto a Moscú, una escalada de tensión que de un modo u otro, pueden acabar pagando los ganaderos de porcino valencianos.