Las diez curiosidades de las Hogueras de San Juan de Alicante que no conoces y puedes descubrir

Alicante celebra entre el 20 y el 24 de junio las Hogueras de San Juan, que se viven en la calle, durante todo el día y con la brisa del mar Mediterráneo como compañera de viaje. Pólvora, desfiles, música, comida, ofrenda de flores… descubre las diez curiosidades las Hogueras de San Juan o Fogueres de Sant Joan.

Los protagonistas de las Hogueras son los monumentos falleros que se exhiben durante las fiestas y se queman en la noche del 24, la de San Juan; en su origen se amontonaban trastos viejos en la calle y se les prendía fuego. A partir de 1928 se crean los monumentos de cartón, madera o corcho que son verdaderas obras de arte y contienen, al igual que en las Fallas de Valencia, representaciones satíricas.

Son las fiestas oficiales de la ciudad y fueron Declaradas de Interés Turístico Internacional en 1983. Si hay un día que esperan los alicantinos es el de la plantà, término con el que se denomina a la instalación de los monumentos en las calles; se produce en la medianoche y un minuto del día 19; es el momento en que inauguran los racós y las barracas, lugares de reunión de las personas que participan activamente en las fiestas.

En la plantà la tradición manda también en la gastronomía y es la noche de probar la coca amb tonyina y bacores; la razón, combinar el sabor salado de la coca, rellena de atún, cebolla y piñones, con el dulce de las brevas.

Se trata de una tradición tan arraigada que hay hasta una oda dedicada a la coca amb tonyina, cuyo autor es el alicantino Juan Vidal, y también hay concurso para elegir la mejor elaborada por los hornos de la ciudad.

Existen además las reinas de las fiestas, que son las Belleas del Focadulta e infantil; se trata de las máximas representantes de las Hogueras, las abanderadas, y su nombre inicialmente era Miss Foguera. Destacan por sus trajes que provienen de las antiguas novias alicantinas.

El primer desfile oficial es del Ninot y tendrá lugar el próximo sábado 10 de junio, en el que miles de foguerers y barraquers adultos e infantiles recorren las calles de Alicante; los ninots son los muñecos de los monumentos falleros. De cada Hoguera que se plantará en la ciudad, se exhibe uno ante las fiestas en la sala de exposiciones de la Lonja de Pescado y, a su vez, de todos ellos y por votación popular se decide cuál se salva de las llamas la noche del 24. A ese muñeco se le denomina ninot indultat o indultado. Todos los indultados pasan a formar parte de la colección permanente de las fiestas, ubicada en el Museo de Fogueres de Alicante.

Los alicantinos no entienden su fiesta sin la pólvora; aquí van unidos las mascletàs -sucesión de petardos que dura entre 5 y 7 minutos que tiene ritmo y va in crescendo- y el lugar en el que se disparan, la Plaza de los Luceros; es una seña de identidad en la ciudad y un punto de referencia, de encuentro y celebración en las fiestas.

Sin duda la noche mágica por excelencia de las fiestas es la cremà, que tiene lugar la noche del 24 de junio; y en el mundo de la fiesta no hay cremà sin banyà. Esa noche se queman los monumentos falleros y, para resistir el calor que desprenden las llamas, los bomberos lanzan agua al público.

Ya sin los monumentos y las barracas por las calles llega el concurso de castillos de fuegos artificiales, que se celebra desde el 25 y hasta el 29 de junio, en la playa del Cocó a las doce de la noche; así los alicantinos se sientan en la arena de la playa del Postiguet para, rodeados de familia y amigos, observar los fuegos artificiales al lado del mar. Esa es otra de las estampas típicas de las Hogueras de San Juan en Alicante.