Agricultura

La plaga de conejos amenaza el futuro de los naranjos valencianos

Los agricultores se quejan de que no hay medidas para poder frenar a los animales, que se comen la corteza y frenan la savia

Un campo de naranjos afectado por los conejos
Un campo de naranjos afectado por los conejosDavid SolerLA RAZÓN

La agricultura valenciana está en un momento complicado. En Turís, un municipio del interior de Valencia, si no es que un campo ha estado afectado por la dana del pasado 29 de octubre es que sufre la embestida de los jabalís y, ahora también, de los conejos.

"Aquí tengo yo ya un retraso en la producción", dice Enrique Grau, agricultor de Turís. Señala una hilera de pequeños naranjos que plantó nuevos el año pasado. Algunos se ven ostensiblemente más pequeños que otros, como si no hubiesen crecido por alguna razón. "Si no está muerta me toca reponer la planta y cuando lo hago, se la vuelven a comer, porque van a lo tierno", explica. Habla de los conejos, un plaga presente durante años en el campo valenciano pero que este año es más grave al haber tenido un otoño y primavera más húmedos. "Este año es peor, el pasado había una sequía importante y como no tenían pasto no se reproducían tanto. Cuando hay de qué comer las plagas se extienden", señala Grau.

En el tallo del árbol se ve como los conejos clavan sus dientes cortándolos y se comen la corteza, dejando el interior al descubierto. "Al cortar la corteza no baja la savia, porque esta sube por dentro y baja por fuera pero no puede y colapsa y si le da la vuelta entera se pierde el naranjo", explica José Ibáñez, delegado de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) en Turís. "Lo cortan como una navaja con sus dientes, lo rascan y se lo comen", afirma.

Si no es el tallo es otro problema peor. "Vienen a buscar agua y cortan la goma y si está en un sitio visible la ves pero si no a lo mejor está rota y regando veinte o treinta días", asegura Ibáñez. "Porque claro, yo no repaso todos los días las gomas de goteo, sino ya no tendría otra faena", le añade Grau.

El naranjo no es el único afectado, pero sí uno de los que más junto a la vid. Al atacar en fase temprana, merman la producción desde un principio. Esta misma semana, AVA-Asaja alertaba de una "multiplicación extraordinaria de conejos a lo largo de este año que vuelve a poner en el punto de mira su tremendo impacto sobre la agricultura valenciana".

Si vas por caminos agrícolas en Turís a primera hora de la mañana o al caer el sol, verás varios cruzar de un campo a otro dando saltos. Durante la noche es cuando aprovechan a comer ante la falta de presencia humana y por el calor, y por el día se esconden en matorrales en campos abandonados o cerca de zonas con agua, por lo que los más afectados son los que tienen las parcelas colindantes, como donde está creciendo naranjos el agricultor turisano.

"Un vecino me dijo el otro día que contó hasta 17 en esta recta de doscientos metros", esgrime Grau, que asegura que la afección en esta parcela es de un 10%, que no es la más afectada. "Yo un año planté 40.000 coles y a los 8 días se las habían comido todas", asegura. De ahí que muchos, asegura, directamente "se haya aburrido" de intentar neutralizarlos y haya dejado perder la producción.

La solución para acabar con ellos no es fácil. Hace años, los conejos eran más grandes y una enfermedad comenzó a afectarles, pero ahora las especies son más pequeñas y resistentes. No hay productos fitosanitarios específicos que no dañen la producción y la opción más segura es proteger los árboles. "Tienes que poner unas unas redes, unas telas metálicas gallineras para que no. ¿Tú sabes lo que es eso a cada árbol meterle uno o dos de esos de dinero y tiempo?", lamenta Ibáñez.

Cazar, la otra opción

Poder cazar a los conejos es la opción más sencilla, pero tampoco funciona. "El otro día vino un compañero con sus dos hijos y cazaron ocho conejos hasta la hora de almorzar", asegura Grau.

La caza se suele hacer con perros, ya que para pedir hacerlo con armas como escopetas hacen falta permisos para batidas extraordinarias. Los cazadores, mientras, esperan a que haya más cantidad para abrir la veda y así poder cazar varios animales.

Los agricultores reclaman que "debería regularlo el ayuntamiento", una medida que la Generalitat ya ha facilitado para jabalíes y otras especies como el ciervo, gamo, cabra montesa, corzo y muflón mediante un real decreto que "amplía los períodos de caza eliminando la prohibición en días hábiles" y que los agricultores piden que se extienda a conejos y otras especies.

Esa medida da más potestad a los ayuntamientos para poder organizar batidas y controlar la sobrepoblación sin necesitar la expresa autorización de la Generalitat, pero aún así estos aseguran no tener los medios para hacerlo. "A nosotros nos han concedido una subvención", asegura Paco Ricau, alcalde de Turís, que alega que es insuficiente y necesitan medios. "Lo que quieren es dejarnos toda la faena a los ayuntamientos de controlar la población" de jabalíes y conejos, asegura el primer edil, que también es agricultor.