Se hace pasar por guardia civil para cerrar los comercios de la competencia

Al propietario de un locutorio de S´Arenal (Mallorca) no le ocurrió otra cosa que hacerse pasar por guardia civil para cerrar los comercios similares de la zona y quedarse con el monopolio del negocio, que sí puede estar abierto durante la pandemia. Para ello, envió denuncias falsas a otros dos establecimientos de la zona con el fin de coaccionar a los dueños para que cerraran. Se le imputa los supuestos delitos de usurpación de funciones públicas, coacciones y falsificación.

La investigación se inició tras comparecer el propietario de un locutorio de S’ Arenal (Mallorca) en dependencias de la Guardia Civil de Llucmajor con el fin de pedir solicitando explicaciones por una denuncia que habían dejado por debajo de la puerta de su negocio.

La supuesta denuncia era por abrir su establecimiento al público y vulnerar el Real Decreto establecido en el estado de alarma; además, un familiar con idéntico negocio en la misma zona había recibido otra en el mismo sentido. A los agentes, tras leer el documento, le llamó la atención algunos datos que se recogían en la supuesta denuncia, por lo que se dio cuenta al momento de que se trataba de una falsificación.

Asimismo, fueron analizadas otras dos denuncias falsificadas, que llevaron a los agentes hasta un tercer hombre que también regenta un locutorio por las inmediaciones. Se realizó un registro en este establecimiento, donde se hallaron documentos oficiales (denuncias y notificaciones) de la Guardia Civil que el detenido había usado para recortar firmas y sellos oficiales y así confeccionar las falsificaciones.