Cerillas para apagar el coronavirus

Apenas unas cerillas han sido capaces de prender la mecha de la solidaridad. Un vídeo de 12 segundos para comprender casi de un único golpe de vista cómo hay que comportarse frente a esta pandemia. Subido a las redes y se hizo la luz, el fuego vital y los cientos de miles de visitas. Más de tres millones. Sus artífices son los artistas Juan Delcan y Valentina Izaguirre, pareja también la vida real que miran con preocupación lo que está sucediendo en Europa y lo que les contamos desde España.

Viven en Lo Ángeles: “Aquí estamos cómo se estaba en Europa hace diez días. Aún no hay tantos casos que se sepa, pero están creciendo rápido. Y en un país de 330 millones de habitantes hacer cálculos de porcentaje de lo que puede pasar asusta”, cuenta a través del email. Y añade un dato aterrador: “Al lado de mi casa la gente hace cola para comprar armas... Es preocupante, bastante más aún que el coronavirus".

Explica Delcan que la idea tiene la autoría de Valentina, “mi ‘’partner in crime’’, este pasado viernes. Llevamos ya un año haciendo animaciones con los Matchsticks y en ocasiones se contagian el fuego en esas historias”. La idea era poner en imágenes de una manera lo más clara posible que si no te separas y te aíslas te contagias. En el vídeo, una cerilla tras otra van prendiendo, una tras otras, hasta que una de ellas se percata y se separa. La cadena, entonces, se interrumpe”. Delcan explica que “la ejecución de las obras varía dependiendo de la idea q se tenga. En este caso lo hicimos en Cinema 4D y la llama de las cerillas la rodamos a parte y lo unimos todo en adobe after effects, un programa de efectos de vídeo”.

Familia de médicos

¿Y por qué trabajar con cerillas? “Tienen una forma y proporciones muy antropomórficas. Solo añadiendo brazos y piernas ya tienes creado un personaje. Posee, además, el valor de esos primeros dibujos que uno hace en la infancia que son como monigotes, con una ejecución muy primaria”, explica el artista, que añade que lo que perseguían era “sensibilizar a la población de lo que han de hacer en una situación sin precedentes como la que se está viviendo a nivel mundial. Yo vengo de una familia de gente que trabaja en la sanidad; mi padre y mi abuelo son médicos mi mamá es enfermera. Y, aunque estuve a punto de seguir sus pasos, al final me decanté por contar historias en este medio”.

La pareja está impresionada con la difusión que ha tenido el vídeo: “Es difícil saber por qué se ha convertido en un trabajo viral, pero mi teoría es que hace falta concienciar a la población, que todavía no se ha dado cuenta de la gravedad de la situación que estamos viviendo, sobre todo aquí en Estados Unidos, donde mucha gente no hace caso a la recomendación de quedarse en casa, que es absolutamente fundamental. Y este vídeo es una herramienta de comunicación, una llamada a la acción. De un vistazo lo comprendes”, explica.

Está convencido de que ya nada volverá a ser como era tras esta crisis en la que las redes sociales son fundamentales. “Sé que esto va a cambiar seguro, aunque no tengo ni idea adónde nos va a llevar. Estoy trabajando ahora en un maravilloso proyecto en España sobre Goya y él fue un revolucionario utilizando el arte como una herramienta de comunicación. Ahora estamos inmersos en plena fase de concienciación y el arte puede ayudar una barbaridad”, asegura Delcan.