¿Cuáles son los cinco grandes papeles de Viggo Mortensen?

1. “Promesas del Este”, David Cronenberg, 2007

El aspecto de Viggo Mortensen en “Promesas del Este” resulta de todo menos afable. Sin llegar a ser intimidante en un primer vistazo, pero tampoco excesivamente empático, Nikolai Luzhin un ex preso que trabaja como chófer de una de las mayores familias del crimen organizado en Londres canaliza todos los impulsos violentos del ser humano. Era la segunda vez que el cineasta David Cronenberg confiaba en el actor para llevar a cabo un trabajo juntos y la apuesta le salió perfecta. Durante el transcurso de la película la extremada violencia orbita sobre algunas escenas especialmente primitivas, como la de la pelea en el interior de un baño turco en donde Nikolai se enfrenta desnudo a otro hombre sin más armas que sus manos y su fuerza, mientras los cuerpos sudados de ambos danzan por la dureza marmórea del suelo entre sangre y silencio. Todas las emociones de Mortensen en esta cinta carecen de humedad. El dolor el seco, el miedo el seco, el odio es seco. Incluso el amor lo es también. En el año 2007 se estrenó en el Festival de San Sebastián y el estadounidense obtuvo su primera nominación a los Oscar por su estremecedor e insondable papel.

2. “Todos tenemos un plan”, Ana Piterbarg, 2012

Si bien es cierto que la película de Ana Piterbarg no termina de destacar como una obra inmensa dentro del género policíaco y de thriller psicológico al que aspira, la interpretación de Mortensen en esta cinta resulta realmente interesante por la oscuridad, ambigüedad y magnetismo con los que transita por sus diferentes y escarbados registros. En “Todos tenemos un plan”, el actor se desdobla para interpretar a dos personas. Por un lado está Agustín, un hombre completamente hastiado y desesperado, que tras años en Buenos Aires, ha convertido de forma pregresiva su existencia en algo frustrante. Tras la muerte de Pedro, su hermano gemelo, Agustín se propone comenzar una nueva vida tomando la identidad de su hermano y regresando a la misteriosa región del Delta, en el Tigre, donde los dos vivieron de pequeños. Poco tiempo después de su regreso, Agustín se ve salpicado por la peligrosidad intrínseca del mundo criminal al que su hermano pertenecía. Cuando el actor estrenó la cinta en 2012 reconoció con aplastante sinceridad que uno en realidad, hace planes para que se vayan a la mierda. Su plan de dar vida a este personaje tuvo sin duda mejor fortuna.

Conmovedor, creíble, salvaje, idealista y profundamente sensible (que no sensiblero). En “Captain Fantastic”, la película dirigida por el cineasta Matt Ross que obtuvo un premio al mejor director en el Festival de Cannes dentro de la categoría de “Una cierta mirada”, el actor despliega su cara más dramática pero también una de sus más honestas. Desencantado del capitalismo norteamericano, interpreta a un padre de familia que tiene que lidiar con el trágico suicidio de su mujer después de que ambos hayan establecido un predilecto estilo de vida sustentado en la convivencia con la naturaleza, el abrazo a las ideas de izquierdas y la transmisión de una educación a sus seis hijos capaz de fomentar el pensamiento crítico y la libertad de movimiento y relación con el otro. A caballo entre la hondura del drama y la ligereza de la tragicomedia, el actor encandiló a la crítica y al público hasta el punto de conseguir otra nominación a los Oscar.

4. “Green Book”, Peter Farrelly, 2018

La nominación a los Oscar el pasado año por su interpretación en esta cinta bien podría servir como justificación suficiente para incluirla en la lista de sus mejores papeles. Inspirada en la verdadera historia del nacimiento de “El libro verde del conductor negro”, una especia de guía práctica para facilitar la seguridad de los negros en los viajes durante un periodo de fuerte segregacionismo en Estados Unidos, “Green Book” traslada la paradójica convivencia de un pianista afroamericano de música clásica llamado Don Shirley y el actor estadounidense con ademanes mafiosos conocido como Toni Lip, que ejerce como chófer y guardaespaldas del cantante a quien da vida Viggo Mortensen. En linea con la rudeza caucásica desplegada en “Promesas del Este”, el actor consiguió sorprender con esta novedosa incursión en el mundo de la comedia. A pesar del carácter ligeramente estereotipado del personaje (chulesco, amante de los problemas, italiano y pendenciero), la honestidad, rapidez y frescura del personaje le valieron una merecida lluvia de reconocimientos. “Cada persona tiene la posibilidad de superar su propia ignorancia y la de su comunidad a través de la experiencia directa de compartir cosas con gente que parece diferente. A la larga, la experiencia siempre vence a la ignorancia”, declaró tras su estreno.

5. “El señor de los anillos: El retorno del Rey”, Peter Jackson, 2003

Se trata sin duda de uno de los papeles más memorables, icónicos y reverenciales que tiene en su haber el polifacético artista. Cuando a finales de los noventa el cineasta Peter Jackson decide trasladar a la gran pantalla la inmensidad y complejidad del universo Tolkien, Viggo Mortensen es uno de los actores elegidos para dar vida a uno de los personajes protagonistas que configuran el arco fantástico de la antológica trama. El capitán de montaraces del monte, Aragorn, sostiene un peso fundamental dentro de la fundación de la Comunidad del Anillo y a pesar de que su arrojo y valentía lideren las tres partes de la saga, es en la tercera de “El retorno del Rey”, cuando su destino termina de cristalizar en su legítimo derecho al trono de Gondor y su posterior coronación como rey. Racional, noble, fuerte, decidido y valeroso, la construcción del perfil de Aragorn supuso para el actor un auténtico revulsivo profesional y propició su consagración como estrella. Pese a que luego renegara de esa fama merecida y propiciada y confesara que prefería trabajar con actores de carne y hueso.