Los Goya se apuntan a la pedrea: “Las niñas”, “La boda de Rosa” y “Adú” parten como favoritas
La 35ª. Edición de los Premios de la Academia de Cine se celebrará en Málaga el sábado 6 de marzo y con Antonio Banderas y María Casado como presentadores
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Después de retrasarse por la gracia de Filomena, la Academia de Cine anunció este lunes las nominaciones de la 35.ª Edición de los Premios Goya. Tras un largo período de votaciones previas, que se modificó una vez confirmado el desplazamiento de la gala de entrega al próximo 6 de marzo, Ana Belén y Dani Rovira, que reaparecía tras lidiar con el cáncer, fueron los encargados de cantar las candidaturas en las 28 categorías que dan brillo y prestigio al premio más importante del cine español.
En unos aparatosos sobres que, según el director de la Academia, Mariano Barroso, se llegaron a plantear traer desde la nieve que bloqueaba el hogar del notario que los custodiaba, los actores materializaron una serie de nominaciones que se entienden repartidas, como en pedrea, pero que en realidad saben a conservadurismo. Una de las grandes incógnitas del era saber si, finalmente, el documental «El año del descubrimiento», podía entrar entre las nominadas a Mejor película. No fue así y el honor recaerá sobre «Ane», «Sentimental», «La boda de Rosa», «Las niñas» y «Adú». Esta última, que ha calado profundamente en el voto académico, ha sido la película más nominada del año, estando presente hasta en 13 categorías. La película de Salvador Calvo sobre los dramas olvidados de África hace así una entrada triunfal en una carrera que hasta ahora parecía dominada por los relatos en femenino.
«Las niñas», de Pilar Palomero, y «La boda de Rosa», de Icíar Bollaín, aunque cuenten con menos nominaciones (9 y 8, respectivamente), todavía son las favoritas, al estar representadas también en las categorías actorales y pelear por el Mejor guion original. La película de Palomero, que también está nominada en la categoría de Mejor dirección novel, se hace fuerte también en dos categorías técnicas que, sin duda, ayudan a narrar la España noventera en la que se desarrolla: Mejor diseño de vestuario y Mejor dirección de producción. Con un nada desdeñable pero sí muy merecido botín de 9 nominaciones, la vasca «Akelarre» buscará el voto furtivo para darle un susto a las grandes.
Regreso a Málaga
De la mano de Antonio Banderas y María Casado, y por segundo año consecutivo con Málaga como ciudad acogedora, la gala de los Goya se acotará a nominados y entregadores de premios. «También se conectará con Valencia, donde daremos el pistoletazo de salida al año Berlanga y se leerán algunos de los premios», explicó un Barroso que aprovechó la ocasión para desautorizar cualquier tipo de fiesta relacionada con los galardones: «No tendrán nuestro apoyo ni difusión, tenemos que dar ejemplo», dijo vehemente.
Esa pulsión pandémica que todo lo domina no ha alcanzado para colarse en el año del documental, donde, pese al elevado número de filmes que han intentado narrar la COVID, ninguno ha entrado entre los nominados. A «El año del descubrimiento», gran favorita, le ha salido competencia en «My Mexican Bretzel», cuyo estupendo valor de producción le ha valido a su directora, Nuria Giménez Lorang, optar también al galardón al mejor debut.
Más allá del triunfo seguro de «La gallina turuleca», como única película de animación que pasó el corte, y de carreras bien animadas por la mejor película iberoamericana (manda «El agente topo») y europea (entre «El padre» y «Falling»), las siempre emocionantes nominaciones actorales dejan varios protagonistas. El taquillero Mario Casas asume su primera nominación como Mejor Actor («No matarás») junto a otros 3 que ya saben lo que es un Goya: Javier Cámara, Ernesto Alterio y David Verdaguer. En el apartado femenino, Candela Peña y Patricia López Arnáiz, flamante Forqué, comparten nominación con la juventud de Amaia Aberasturi y la veteranía de Kiti Mánver. Todo ello tras el peor año del siglo para la taquilla española y cuando la media de tiempo para levantar un filme sube hasta los seis años.