Un acto vandálico daña las pinturas rupestres de Alburquerque, en Badajoz

En el Risco de San Blas, en Alburquerque (Badajoz), figuran unas pinturas rupestres que datan del Neolítico y la Edad de Bronce. Un tesoro que, como toda obra de arte, merece de nuestra conservación, respeto y admiración. No obstante, como en todo, hay quienes pecan de ignorantes respecto a lo valioso de estas pinturas. Y, como consecuencia, se ha producido un ataque lamentable: un acto vandálico ha dañado uno de los tres abrigos que conforman el conjunto de pinturas rupestres de Alburquerque.

El autor o autores, aún sin identificar, de esta agresión, han dibujado “un monigote” sobre las dos figuras antropomorfas de este abrigo, según ha denunciado un técnico municipal, Eduardo Maya. “Son pinturas que llevan ahí alrededor de 4.000 años y que, ahora, de forma incomprensible, han sido dañadas”, explica. El acto vandálico ya ha sido informado a la Dirección General de Patrimonio, que investigará lo sucedido.

Este acto vandálico, según aseguran algunos medios locales, no es el primero que se sufre en la zona, pues tiene un reciente precedente. Se trata del Castillo de Luna de Alburquerque, donde aparecieron algunas pintadas en los lienzos de la muralla norte.

El conjunto de pinturas rupestres del Risco de San Blas fue declarado Monumento Histórico-Artístico en 1924. Está formado por tres abrigos, pero solo uno de ellos, el principal, está vallado. Por su parte, los otros dos, entre ellos el que ha sido asaltado, carece de protección. En cuanto a las pinturas, se distinguen dos fases bien diferenciadas: la primera, formada por motivos de trazo grueso y color anaranjado, así como otra parte con más detalle figurativo, trazos más finos y colores de diferentes tonalidades.