Un niño de 12 años gana 135.000 euros vendiendo NFT de ballenas de colores
Se trata de Benjamin Ahmed, un joven londinense que ha vendido la totalidad de su colección “Weird whales”, compuesta por 3.350 imágenes pixeladas
Hay expertos que aseguran que el “boom” de los NFT no es más que una nueva herramienta del mercado del arte. Pero lo que también podría ser es un fenómeno repleto de paradojas y creaciones a cada cual más peculiar. Cada vez son más las noticias de “superventas” de estas obras digitales y pixeladas, o bien de iniciativas para vender copias digitales de todo tipo de monumentos: hace pocos días, una serie de artistas y expertos en el arte ofrecieron la idea de vender un “NFT” del Coliseo, con el objetivo de apaciguar la inestabilidad financiera del país vecino.
No obstante, no solo son obras reconocidas de este tipo, sino que también triunfan en este tipo de ventas nuevas producciones, sea del tipo que sea, y algunas quizá incluso más peculiares que el “Everydays” de Beeple. Esta vez, ha sido un niño de 12 años quien debe haber alegrado bastante a sus padres: en un solo día, ha ganado 135.000 euros vendiendo NFT creados por él mismo.
Si bien puede valer como NFT una copia del “Tondo doni” de Miguel Ángel, un tuit, una canción o hasta un código genético, en el caso del joven de Londres, Benjamin Ahmed, la venta ha sido de su colección “Weird whales” (”Ballenas extrañas”). Se trata de una serie de imágenes con coloridos diseños de ballenas pixeladas que ha difundido a través de la red Ethereum.
Ahora, el niño tiene en el bolsillo 135.000 euros y un récord en este tipo de ventas para alguien de su edad. Su padre, que trabaja como desarrollador web, fue partícipe de la creación de estas ballenas. Todo comenzó cuando un creador de otros NFT, esta vez de “Boring bananas” (”Plátanos aburridos”), le envió una plantilla para que creara sus propias imágenes. Y el padre le dijo, según publica en Twitter: “Mira, tienes que sustituir los nombres de las variables de aquí, así que donde tienen plátanos tienes que sustituirlos por tus ballenas”.
“Me interesé en el mundo NFT porque al principio pensé que era genial como forma de expresión en línea”, explica el joven Ahmed. Ante esto, decidió codificar su propia colección, dando como resultado una serie de ballenas, cada una con diferentes colores o rasgos y, de hecho, algunas más valiosas que otras. La colección de Ahmed tiene un total de 3.350 ballenas coloridas, vendiéndose su totalidad en menos de 24 horas gracias a la viralización del proyecto.