Sección patrocinada por sección patrocinada

Cine

Crítica de “Pequeña flor”: los peligros del jazz ★★★☆☆

"Pequeña flor", de Santiago Mitre
"Pequeña flor", de Santiago MitreSURTSEY

Director: Santiago Mitre. Guion: Mariano Llinás y S. Mitre (Novela de Iosi Havilio). Intérpretes: Daniel Hendler, Vimala Pons, Melvil Poupaud, Sergi López, Françoise Lebrun. Francia, 2022. Duración: 98 min. Comedia.

Una vez y otra y otra suena en la película dirigida por Santiago Mitre (que ha estrenado recientemente en nuestro país su anterior película, «Argentina, 1985», nada que ver) esa preciosa, delicada joya del jazz titulada «Petite fleur», aunque mientras el disco gira se produzcan una serie de asesinatos singularmente cruentos. Lo curioso es que siempre «muere» el mismo tipo. Vamos a intentar explicarlo: José, un dibujante argentino que recientemente se ha mudado a Francia con su pareja y una hija recién nacida, acaba de quedarse en el paro, lo que provoca que ella decida volver a trabajar mientras el joven se hace cargo de la niña. Un día, Miguel conoce a un peculiar vecino (personaje este que Antonio Banderas, quien también anda por estas páginas, bordaría en una versión miamense), un tipo simpático, pedantillo, hortera, sin problemas de dinero en apariencia y amante del mencionado género musical. De ahí que cada vez que le visita el otrora pasivo, gris, conformista Miguel, ahora inmerso en la confusión y una no reconocida depresión rayana en la majadería, acabe poniendo el mencionado tema para inmediatamente ser liquidado de las peores maneras posibles. Porque, cada jueves, Miguel termina estrangulando, disparando, ahogando, descuartizando y no sé cuántas perrerías más al pobre hombre, que consigue «revivir» semanalmente. Otro detalle: las noches en que realiza los horrendos crímenes cada vez de una manera más indiferente y casi resignada (la bendita rutina, dice Miguel), la pareja, que atraviesa una crisis agravada por la aparición de un gurú catalán caradura, orondo y enigmático, se corren unas juergas fenomenales que incluyen conciertos ofrecidos por viejas estrellas de la música gala, alcohol así como un sexo loco y buenísimo. Empapada de humor negro, atrevida, desconcertante y libérrima, la propuesta de Mitra puede sorprender, enganchar, repeler e irritar a partes iguales, pero de ningún modo dejar indiferente a nadie. El jazz, que nos hace perder la cabeza...

Lo mejor: Daniel Hendler, que consigue que su personaje provoque a la vez pena, miedo y mucho coraje

Lo peor: Es una propuesta tan libre y radical que habrá a quien le resulte algo irritante y disparatada