Lo que dejamos atrás en 2022

Terminamos 2022 con inflación alimentaria desorbitada, pero con la gente abarrotando todo, especialmente en Madrid. ¡Hay que ver lo que dan de sí las ganas de vivir tras estos tres años y las subvenciones, sobre todo, a quienes además están trabajando en negro! Es la única explicación para tanta actividad.

Empezamos el repaso por los adioses: nos dejaron Miguel Muñiz, Antonio Blancas, Elio Frigerio, Isabel de Falla, Hans Neuenfels, Ángel G. Piñero, Bernabé Martí, Radu Lupu, Nicolas Angelich, Harrison Birtwiltle, Teresa Berganza, Vangelis, Richard Taruskin, Peter Brook, José Guirao, Stefan Soltesz, Lars Vogt, Ana María Sánchez...

Celebramos, entre otros, el año Scriabin, el doscientos aniversario del nacimiento de Cesar Franck, el centenario de Tebaldi, el de Iannis Xenakis, los 175 años del Liceo, el centenario de la Sinfónica de Bilbao, el de la muerte de Pedrell, los 150 años de la primera piedra del Festpiehaus, de Bayreuth o de Vaugham Williams, los 40 del fallecimiento de Mario del Monaco, los XX años del Concurso de Piano de Paloma O’Shea, los 80 de Tomás Marco con su estreno de «Policías y ladrones», los espléndidos 90 de Achúcarro, etc.

Empezó 2022 con Barenboim dirigiendo el concierto de Año Nuevo y ya con signos de la enfermedad que le retiraría de los escenarios tras el desastre salzburgués. Esperemos que su anunciado regreso sea en condiciones. Zubin Mehta también pasó por dificultades. El que sigue fuerte entre los veteranos es Bloomstedt. Las polémicas ocuparon un lugar importante en los medios, principalmente, por el tema del veto a artistas rusos en armonía con Putin. Lo sufrieron Gergiev, Netrebkko –que demandó al Met–, Tugan Sokhiev... También por el «blackface» en Verona o la reacción homófoba de René Pape luego atemperada.

Fueron noticia Jesús Iglesias por su renovación en les Arts hasta 2027, Arteta por su regreso; Nuria Núñez por alzarse con el Premio de Composición Reina Sofía; Juan Francisco Marco por colocarse al frente del Inaem; Philip Glass, por su Premio BBVA; Heras Casado, por su debut en la Scala; Aquiles Machado, por su nueva responsabilidad al frente de los Amigos de la Ópera coruñesa; Francisco Coll, por el BBC Music Award; Klaus Mäkelä, nombrado director de la Orquesta Concertgebouw; Gatti, por suceder a Thielemann en la Staatskapelle Dresde; Jakub Hrusa por Pappano en la Royal Opera House; Rolando Villazón, que renovó como director artístico del Mozarteum; Cecilia Bartoli, como presidenta de Europa Nostra; Gustavo Gimeno, como director musical del Real y Premio Ópera XXI, donde también se reconoció la carrera de Gómez Martínez; Plácido Domingo, por su vuelta de tapadillo al Teatro Real, por sus problemas en Verona y su nueva residencia madrileña; Víctor García de Gomar, por su renovación en el Liceu y Chichon por la suya en la Filarmónica de Gran Canaria; Álvaro Albiach como principal director invitado de la Orquesta de Valencia y Roberto González-Monjas como titular Sinfónica de Galicia; Baldur Brönnimann, por suceder a Paul Daniel como director de la Real Filharmonía de Galicia; Currentzis, que presentó su nuevo proyecto orquestal Utopia; Alicia Díaz de la Fuente y Jaime Martín, galardonados con los Nacionales de Música; Carlos Chausson, por su retirada, la English National Opera por su dudoso futuro, el Real por acoger la gala International Opera Awards y presentarse en el Carnegie Hall, las denuncias en Italia por corrupción musical...

Todo esto y algunas cosas más en el tintero es lo que dio de si musicalmente 2022.