Ai Weiwei dice que fue interrogado por tener admiradores extranjeros
El artista chino Ai Weiwei admitió hoy en Londres que su detención en China le "afectó profundamente"y contó que las autoridades estaban menos interesadas en su arte y más en sus contactos con admiradores y periodistas extranjeros. El disidente chino, que el pasado julio recuperó su pasaporte después de cuatro años sin él, ofreció hoy una rueda de prensa con motivo de su muy esperada exposición en la Royal Academy of Arts (RA, siglas en inglés), que se inaugura el día 19.
En medio de una gran atención mediática en la RA, Ai explicó cómo le afectó su detención en China durante 81 días y su imposibilidad para viajar al extranjero cuando le quitaron el pasaporte en 2011 al iniciarse un proceso por supuesto fraude fiscal.
El encarcelamiento "me afectó profundamente a mí y a mi familia", especialmente a su hijo de seis años que vive en Alemania, pues "tenía pesadillas de que nunca me dejarían salir", reconoció el artista, visiblemente feliz por la atención de la prensa.
También contó que su madre "envejeció muy rápido" y "aún se preocupa por mí todos los días", contó Ai Weiwei en una conferencia moderada por el director artístico de la RA, Tim Marlow.
Preguntado sobre los interrogatorios durante su detención, el disidente relató: "ellos decían que tenía demasiados seguidores extranjeros y que hablo con muchos periodistas, esa fue la razón".
Los interrogatorios -agregó- eran siempre "sobre mi libertad, no sobre arte, con algunas excepciones".
Tras recuperar su pasaporte, Ai Weiwei, de 58 años, se encontró con que las autoridades británicas no le daban el visado para viajar a Londres para estar en su exposición de la Royal Academy.
Al ver que los británicos le denegaron el visado, Ai recurrió a las redes sociales como manera de convencerles de que no tenía antecedentes criminales en China como creían.
"Traté de explicarles, fue gracioso porque obviamente esta es una excusa equivocada. Estoy muy feliz de que cambiaran (de posición) muy rápidamente y admiro la manera en que se puede cambiar tan rápido una decisión formal", admitió el disidente chino, que agradeció las muestras de apoyo que recibió por la Red.
Si bien no recibió condiciones al recuperar su pasaporte, Ai reconoció que no sabe lo que pasará a su regreso a China.
"Aún en China tengo que trabajar con mucho cuidado si quiero mostrar mi trabajo. Tengo que tener mucho cuidado, siempre hay censura allí", explicó Ai Weiwei, y recalcó que nunca lamenta las decisiones que ha tomado en el pasado. "Si vuelvo atrás, tomaría la misma ruta", sentenció.
En una muestra de solidaridad de otros artistas con la situación de Ai Weiwei, la Royal Academy decidió en mayo de 2011 elegirlo como miembro honorario de esta prestigiosa institución.
En la muestra se incluirán importantes trabajos realizados por este artista contemporáneo desde 1993, cuando regresó a China tras permanecer más de 10 años en Nueva York.
Las instalaciones son una mezcla de la influencia de la cultura china y sus contactos con el mundo del arte occidental.
Entre las obras figuran unas esculturas tituladas "Cámara de vigilancia", realizada en 2010, y "Cámara de vídeo", de 2010, así como una nueva creación titulada "Restos", fabricada en porcelana y que reproduce en detalle unos huesos excavados recientemente de una zona que funcionó como campo de trabajo en los pasados años cincuenta.
El director artístico de la RA, Tim Marlow, dijo que Ai Weiwei es hoy uno de los más importantes artistas del mundo.
Con esta exhibición, agregó Marlow, la gente "tendrá la oportunidad de experimentar un fenómeno creativo que es a la vez radical, político, arquitectónico, histórico, poético".