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Ana Rujas: «Conocí la obra de Agatha Christie al preparar la Selectividad»

Antes de llegar al Amaya madrileño el 17 de enero, pasea la versión teatral de «Muerte en el Nilo» por el resto de España

Ana Rujas / Foto: Cristina Bejarano
Ana Rujas / Foto: Cristina Bejaranolarazon

Antes de llegar al Amaya madrileño el 17 de enero, pasea la versión teatral de «Muerte en el Nilo» por el resto de España.

Ana Rujas está en una etapa dulce, y es que el público tiene ganas de verla. Como termómetro de eso podríamos usar las redes sociales, donde tiene bastante presencia y seguidores, pero lo que realmente demuestra su buen momento es que los directores quieren contar con ella, y da igual si es sobre las tablas de un teatro o frente a una cámara. El pasado septiembre se estrenó su primera película como protagonista, «Diana» (de Alejo Moreno), en la que se pone en la piel de una prostituta de lujo. Y también participa en la adaptación teatral de la novela de Agatha Christie «Muerte en el Nilo», en la que comparte reparto con Pablo Pujol y Adriana Torrebejano, entre otros. Dirigida por Víctor Conde, ya ha empezado a interpretarse en distintas localidades españolas, y en un mes (17 de enero) llegará al Teatro Amaya de Madrid.

–¿Cuál fue su primer contacto con la obra de Agatha Christie?

–Lo tuve joven, como yo creo que casi todo el mundo, porque estamos hablando de una escritora que es un clásico. Fue hace muchos años en el colegio, en bachillerato, en la época que tenía que preparar la Selectividad.

–Su compañera de reparto Adriana Torrebejano ha dicho que está versión es más contemporánea y más «hot». ¿A qué se refiere?

–(Risas) Eso es porque hemos estado trabajando para hacerlo de una manera más actual, sin dejarnos la esencia de la autora, claro está. Hemos intentado no perder eso, pero también adaptarlo a nuestra forma.

–¿El público de teatro es cada vez más parecido al televisivo y exige caras conocidas?

–Me gustaría que ambos grupos fuesen lo mismo, que no hubiese tanta distinción. Para mí el camino ideal o, digamos, el final del túnel que yo veo, es una mezcla entre todos estos espectadores, que todo el mundo tenga en su rutina ir al cine y al teatro. Y creo que cada vez está pasando más. Y por nuestra parte hay que intentar incorporar a los de un lado al otro. Con esta obra hemos querido acercar Agatha Christie a la gente joven. Como eso es lo que yo deseo, también es mi objetivo con un proyecto personal que preparo.

–Es muy activa en las redes sociales. ¿Han cambiado de alguna manera la vida de los intérpretes?

–Si acaso, para bien. A mí me han ayudado, por ejemplo, con una obra a la que fue la gente joven porque lo vieron en mis redes sociales. El público venía en masa y todos educadísimos. Y eso que era un monólogo de teatro, me quedé alucinada con el recibimiento. Estoy muy contenta porque haya gente que nos pueda seguir de esa manera.

–El 8 de noviembre del año que viene se estrenará una nueva versión de «Muerte en el Nilo» en los cines. ¿Da más tranquilidad o exigencia sabiendo que el espectador de la obra de teatro probablemente vaya a ver la película el año que viene?

–En mi opinión es bueno incluso que ambas convivan a la vez porque se suscita la curiosidad de la uno a la otra. La gente que vaya a ver la película quizá quiera ver nuestro planteamiento, y al revés.

–¿Y qué le ha parecido la reciente película de la novela de Agatha Christie «Asesinato en el Orient Express»?

–Me parece que la historia está muy bien contada, y me encantan los personajes, pero es que ya el libro te los da y son geniales. Eso sí, tienen un punto de profundidad bastante fuerte que quizá se descubre más en la literatura. En el largometraje se busca el lado oscuro, y cómo se comportan en esa época. En nuestra obra cada uno también tiene una parte un poco similar.

–Hace unos meses estrenó, como protagonista, «Diana». Igual que dice de «Muerte en el Nilo», está rodeada de cierta oscuridad...

–Sí bueno, más que oscuro, lo que pasa es que se trata de una cinta bastante expresionista, como si fuese un cuadro de esa corriente, que a veces puede resultar incómoda, otras divertida, y que desprende cierto erotismo. Creo que el personaje de Diana dista mucho del de la obra, así que estoy contenta de poder estar haciendo distintos registros de interpretación.