La receta de Damien Hirst: Diazepam y hamburguesas

El artista resucita su obra en un nuevo restaurante situado en la Newport Street Gallery en Vauxhall, que lucirá el nombre de Pharmacy 2

A finales del siglo pasado, Damien Hirst compartía almuerzos con sus compañeros artistas en un restaurante de Notting Hill con aspecto de farmacia. El propio Hirst había sido quien diseñó la estética del lugar, sin embargo, Pharmacy (así se llamaba) cerró en 2003. Un año más tarde, Sotheby´s subastó 150 lotes con la decoración del local por un valor de más de 14 millones de euros. Pero no todo se perdió, y ahora el artista ha resucitado su obra en un nuevo restaurante situado en la Newport Street Gallery en Vauxhall, y que lucirá el nombre de Pharmacy 2 desde su apertura el 23 de febrero.

Hirst afirmó a “Evening Standard” que este proyecto “combina dos de mis grandes pasiones: arte y comida”. Del menú se encargará su socio, el chef Mark Hix. Ambos han colaborado anteriormente en los establecimientos del cocinero en los barrios londinenses del Soho o Shoreditch, que Hirst transformó a su peculiar manera. No obstante, la idea de Pharmacy 2 no fue premeditada, sino que surgió de un encuentro fortuito en el famoso restaurante Scott's en Mayfair, según explica Hix: “Pasaba por Scott's y Damien estaba allí. Entré a saludarle y él dijo: “Necesito un chef... para otro Pharmacy”.

No es la primera vez que Hirst incluye los medicamentos como parte esencial de su obra. De hecho, el local se puede considerar una continuación de su serie “Medicine Cabinets”, que comenzó en 1988. Así, en las ventanas se han impreso cadenas de ADN, en los sofás y sillas se han pintado pastillas y píldoras de colores, y las paredes están cubiertas con cuadros de mariposas caleidoscópicas, y repisas con medicamentos. La farmacia es un intermediario entre la salud y la enfermedad, entre la vida y la muerte, dos de los temas centrales de la obra de Hirst, que el cliente podrá debatir mientras disfruta de la decoración multicolor y del menú que Mark Hix modificará cada semana. Eso sí, siempre con contundentes platos británicos y europeos para los visitantes de la Newport Street Gallery.