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10 películas imprescindibles para celebrar el Día del Padre

Este sábado es el momento perfecto para dar el reconocimiento y el cariño que -sin duda- nuestros padres merecen
La Razón
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Los países católicos celebran el Día del Padre el 19 de marzo. Tristemente, esta celebración suele quedar en segundo plano. Una injusticia de primer orden, teniendo en cuenta el impacto positivo que un buen padre tiene en el desarrollo de sus hijos. Además de velar por la seguridad y el bienestar de sus hijos, el padre se encarga -tradicionalmente- de prepararlos para desenvolverse en un mundo hostil. Un padre suele encargarse de la ingrata tarea de sacar a sus hijos de su zona de confort y de enseñarles a sostener su propio peso.
Con demasiada frecuencia, interpretar este papel no es plato de buen gusto. Sin embargo, es absolutamente necesario que alguien asuma ese rol para que el niño se convierta en hombre y para que la niña se convierta en mujer. Pero a pesar de todo, seguimos sin dar a nuestros padres el reconocimiento y el cariño que -sin duda- merecen... y este sábado es un buen momento para corregirlo.
Desde el periódico La Razón queremos proponerte un plan tranquilo, pero muy especial para esta jornada dedicada a los padres: cine en familia. Es la ocasión perfecta para sentarnos todos juntos y ver una película que reivindique el sacrificio y la generosidad que un padre tiene para con sus hijos. A continuación, podrás encontrar una serie de títulos que han hecho de esto su argumento central:
1. Beginners (Principiantes), así se siente el amor
Esta película llena de flashbacks se centra en la relación de Oliver, interpretado por Ewan McGreggor, con su padre (Christopher Plummer), que sufre una enfermedad terminal. En este momento, cuando debe enfrentarse a la dura realidad de prescindir de un hombre que siempre le ha guardado las espaldas, también se entera de todos los sacrificios que hizo su padre por su familia.
2. La carretera
En esta cinta, un padre (Viggo Mortensen) y su hijo (Kodi Smit-McPhee) se ven en la necesidad de sobrevivir en un mundo post apocalíptico. A lo largo del metraje, el padre debe sortear toda clase de dificultades para mantener a su hijo a salvo -y sobre todo- para que el niño se convierta en un hombre responsable y con principios.
3. El rey león
Que ‘El rey león’ sea una de las películas de esta lista no debería sorprender a nadie. Muchos de nosotros nos hemos criado con ella y hemos llorado la muerte de Mufasa. La cinta sigue la historia de Simba, un joven león que debe superar el infantilismo y la inmadurez de la adolescencia representadas por Timón y Pumba, y asumir la responsabilidad que le inculcó su padre, para recuperar los dominios que ahora están bajo el control de su tío Scar.
4. Lo mejor de mi vida
Se centra en la historia de una familia rota tras la pérdida de una madre. Jake Davis (Russel Crowe) debe tomar el control de la situación y cuidar de su hija Katie (Amanda Seyfried) mientras se enfrenta a sus demonios. La película se extiende desde la infancia de Katie hasta su edad adulta, cuando toma el ejemplo de su padre para ayudar a niños con problemas psicológicos.
5. Billy Elliott
En los tiempos de Thatcher, un minero debe superar sus prejuicios para permitir y ayudar a que su hijo Billy pueda cumplir su sueño de convertirse en bailarín de ballet. La cinta está repleta de momentos sumamente conmovedores que muestran las dificultades que deben enfrentar un padre soltero y su familia para salir adelante. Sin lugar a dudas, es una película que merece un puesto honorífico en esta lista.
6. Siempre serás mi hijo
David (Steve Carrell) debe luchar contra los hábitos poco saludables de su hijo Nic (Timothée Chalamet). Durante toda la película, David intenta dilucidar en qué falló en la educación de su hijo. A menudo recuerda la fuerte conexión que tenían durante la infancia de Nic y se pregunta cuándo se torció todo. Un tema complejo e importante, narrado con la seriedad y la madurez que merece.
7. Hasta pronto, Christopher Robin
Esta película está basada en un personaje real... aunque con una buena dosis de fantasía. Se centra en la relación entre el creador de Winnie the Pooh, A.A. Milne (Domhnall Geeson), y su hijo. El escritor crea todo un mundo ficticio para su hijo Cristopher, que va creciendo a la vez que su padre se va haciendo más y más famoso. Al principio la relación entre ambos es perfecta, sin embargo, poco a poco va empeorando.
8. En busca de la felicidad
En esta película descubrimos la aptitud de Will Smith para el drama. Pero también descubrimos por primera vez a su hijo Jaden. En la cinta, padre e hijo interpretan a Cris y Christopher Gardner (que también son padre e hijo). Chris Gardner se presenta desde el principio como un padre frustrado y decepcionado por su difícil situación económica, que le impide mantener a su familia. La esposa y madre de la familia (Thandie Newton), desaparece de escena en los primeros minutos de la película; y a partir de ese momento, Chris debe conciliar un trabajo de becario y una situación económica cada vez más desesperada para poder convertirse en corredor de bolsa y poder darle un futuro a su hijo.
9. Mañana empieza todo
Samuel (Omar Sy) es un vividor que se lo pasa en grande en la costa francesa. Sin embargo, todo su mundo sufre un vuelco cuando una antigua amante se presenta con un bebé en los brazos y desaparece de la escena. Samuel debe sobreponerse a la situación y asumir su responsabilidad como padre. En un primer momento, el protagonista busca de la mamá de la niña, pero a medida que pasa el tiempo va perdiendo el interés por volver a su vida anterior. Ocho años más tarde, la madre de la niña regresa y trata de recuperar a su hija.
10. La vida es bella
Esta es -posiblemente- la mejor película de toda la historia de nuestra especie. La obra maestra de Roberto Benigni explora la dura realidad del Holocausto desde los ojos de una de sus víctimas: Guido. Durante la cinta, el protagonista -interpretado por el propio Roberto Benigni- enamora al público con sus excentricidades y con su actitud positiva. Una actitud que no pierde -ni siquiera- cuando debe afrontar el horror del exterminio de su pueblo. Al llegar a los campos, Guido hace creer a su hijo que la pesadilla que están viviendo es -en realidad- un divertido concurso con el que podría llegar a ganar un tanque. Es una película llena de sabiduría que sería capaz de sacarle las lágrimas al tipo más duro.

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