Estreno

Crítica de “L’immensità”: una mujer bajo la influencia ★★★☆☆

Dirección: Emanuele Crialese. Guion: Emanuele Crialese, Francesca Manieri y Vittorio Moroni. Intérpretes: Penélope Cruz, Vincenzo Amato, Elena Arvigo, Filippo Pucillo. España, 2022. Duración: 97 minutos. Drama.

Con Raffaella Carrà de fondo, y una madre que oscila entre la euforia y la depresión, Adriana pone en crisis todo lo que atraviesa su penetrante mirada: su identidad de género (le gustaría llamarse Andrea); una institución familiar opresiva, controlada por la ira de un padre ausente e infiel, capaz de ejercer la violencia de género como si fuera un derecho adquirido por el macho latino; su propia conciencia de clase media-alta, encarnada en sus hipocresías y contradicciones cuando se enamora de una adolescente gitana, en medio de un espacio urbano en plena transformación.

Esa mirada que cuestiona -que es la del propio Emanuele Crialese, que en “L’immensità” se entrega a un relato autobiográfico- debería interrogar también las propias formas de un cine de la memoria que, aquí, se desarrollan sin apenas sobresaltos, con una laxitud dramática que suaviza las aristas de la materia prima narrativa. Si la película puede ser, a veces, un acertado retrato de una sociedad misógina (la de la Italia de los setenta) que podemos reconocer en sus hábitos enfermos, no tiene la suficiente entidad para calar hondo en el espectador. A ratos parece que Crialese organice “L’immensità” alrededor de la estupenda interpretación de Penélope Cruz, que impregna de conmovedora vulnerabilidad toda la pasión reprimida que su papel de ama de casa y esposa resignada le obliga a contener. Cuando esa mujer bajo la influencia desaparece, cuando Penélope no está en el centro del plano, “L’immensità” se empequeñece.

Lo mejor

Penélope Cruz borda, otra vez, el papel de madre, esta vez bajo la influencia de la opresión patriarcal.

Lo peor

Crialese toca muchos temas, pero no con suficiente intensidad.