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Chris Rock, el único negro que tocará el Oscar

Chris Rock vuelve a presentar la ceremonia de los Oscar, que condujo ya en 2005. Seguro que su humor ácido y sus chistes tendrán como blanco el tan comentado racismo en la industria del cine. Atentos al guión

Chris Rock vuelve a presentar la ceremonia de los Oscar, que condujo ya en 2005
Chris Rock vuelve a presentar la ceremonia de los Oscar, que condujo ya en 2005larazon

La de este año será una gala marcada por la discriminación racial y que contará con destacadas ausencias. El poder negro de Hollywood, del que Will Smith es un referente, ha contestado la falta de nominados de color con un boicot. De ahí que Chris Rock, el presentador, sea el único afroamericano con un papel estelar en los Oscar. Será también el año en que Leonardo DiCaprio podría llevarse su primera estatuilla

La ceremonia de los Oscar viene cargada no sólo de buenas películas sino también de controversia. Todo transcurría con normalidad hasta que se anunciaron las nominaciones: ¿dónde estaban los actores negros? No había ni uno. Will Smith protagonista de «La verdad duele» se quedó sin ella tras haberla recibido un mes antes en los Globos de Oro. Con las redes sociales como bandera, April Reign (abogada y editora de BroadwayBlack.com) decidió crear el hashtag #OscarsSoWhite para hacer ver a la gente lo injusta que estaba siendo la Academia de Hollywood a la hora de repartir las valoradas candidaturas. Los medios de comunicación empezaron a hacerse eco de este boicot, aunque Reign discrepa del término: «Es una palabra que nunca he utilizado cuando me he referido al tema. Tampoco lo han hecho Spike Lee ni Jada Pinkett-Smith. Ha sido un vocablo creado por los medios, especialmente los internacionales para simplificar lo que ha pasado y reducirlo a un problema entre blancos y negros», comentaba recientemente. April afirma que el hashtag #OscarsSoWhite va dirigido a todas las minorías, no solo a los actores de raza negra. Para ella no es un simple problema binario, sino que incluye a mucha más gente. Hace hincapié en que homosexuales, mujeres y actores de cierta edad tampoco están bien representados en el cine. De hecho, Anohni (antes Antony Hegarty, líder de Antony and the Johnsons) declaró el viernes que es la primera candidata transexual que no asistirá a la gala, pues no ha sido invitada a actuar durante la gala.

La razón de este boicot en ciertos sectores estriba en que se trata del segundo año en que no hay ni un sólo afroamericano entre los 20 candidatos a las cuatro categorías de interpretación. Will Smith, su mujer Jada Pinkett- Smith, Spike Lee y Michael Moore serán algunos de los que no acudirán a la ceremonia. El foco estará puesto sobre el presentador, Chris Rock, famoso comediante conocido por su ácido sentido del humor y cuyos dardos pueden clavarse en algunos miembros de la Academia. No cabe duda de que hará referencia al tema, lo que aún no sabemos es cuan irónicos serán sus comentarios. Hay que tener en cuenta como puede afectar esto a las audiencias teniendo en mente que el año pasado la ceremonia tuvo su peor «share» desde 2009. El cantante, actor y compositor Tyrese Gibson y el rapero 50 Cent pidieron a Rock que renunciara a presentar los premios, aunque él desoyó la petición. No obstante, y dada la temperatura que se prevé alcance la ceremonia el productor de la gala Reginald Hudlin dijo días atrás que Rock y su equipo de guionistas «habían decidido rehacer el guión que tenían antes del problema del boicot. Han escrito un nuevo ‘‘show’’». ¿Será tan corrosivo como el humor de Rock o habrá suavizado sus acerados comentarios?

- Sin favoritos claros

Según los críticos va a ser un año impredecible. La que parece ser la favorita para llevarse el galardón a la mejor película es «Spotlight», cuya trama trata del escándalo que sacó a la luz el periódico «The Boston Globe» sobre los abusos sexuales a niños por parte de sacerdotes, un filme de bajo presupuesto y que se adapta perfectamente a lo que los académicos buscan en una película con factura ganadora. Pero no sólo ésta parece tener todas las papeletas.

La carrera de «El renacido» de Alejandro G. Iñárritu es imparable y «La gran apuesta» tiene más que buenas opciones para hacerse con la estatuilla. Recientemente ésta ganó el premio SAG (Screen Actors Guild) al mejor reparto, premio que equivale al de mejor película en la ceremonia de los Oscar. Según algunos «La habitación» puede también dar una sorpresa si los miembros se han inclinado por el voto emocional. Iñarritu ya prepara su discurso ante la posibilidad de ser coronado como mejor director. Se llevó el que concede el sindicato de directores, prácticamente una garantía de que el Oscar va a ser suyo. Sólo en siete ocasiones no han coincidido.

En el plano económico la ceremonia inyecta cada año a la ciudad de Los Angeles unos 130 millones de dólares. 89.6 millones es el total de dinero que recaudó la Academia el año pasado. La mayor marte viene de Walt Disney Co. que paga 75 millones de dólares por los derechos de emisión en su canal ABC. Contrato que de momento tienen sellado hasta el 2020. Producir la ceremonia no es barato, 38 millones fueron dedicados la pasada entrega. En el 2012 la cantidad fue de 21.8 millones. Los productores se llevan más de cien mil dólares. El presentador, este año Chris Rock se embolsará de 15.000 a 25.000 dólares. Las estatuillas bañadas en oro de 24 kilates (hay un total de 50) cuestan 45.000 dólares, es decir, a unos 900 la figurita.

El monologuista de los 70 millones

Chris Rock confiesa que admira a figuras como Eddie Murphy o Richard Pryor y ya presentó la edición número 77 de los Óscar en la que aún se recuerda su ácido comentario hacia Jude Law que el actor Sean Penn no dudó en recriminarle cuando subió al escenario. Todo apunta a que el de este año serán más jugosas vaún sus intervenciones. El artista lleva más de tres décadas de carrera como monologuista. Ha ganado cuatro Emmy en televisión en 1997, 1999 y 2009. Tiene 51 años está divorciado y su fortuna personal se calcula en más de 70 millones de dólares.