«Gru 3», el doble de villano

Steve Carell y Kristen Wiig prestan otra vez sus voces a los protagonistas de la nueva entrega, muy ochentona.

Es mirarle la cara y recordar la fantástica serie cómica «The Office». Lo siento, pero Steve Carell bordaba el papel de aquel jefe inseguro a ratos y un gran inepto siempre rodeado de una panda no menos descerebrada de subordinados. Todos adorables y como auténticas cabras. Hace unos pocos días el también protagonista de «Virgen a los 40», «Pequeña Miss Sunshine» y «Café Society» visitaba Madrid para presentar «Gru 3», donde le presta de nuevo la voz al villano más buenazo de la historia, ya felizmente casado con la larguirucha Lucy (Kristen Wiig, sentada a la izquierda de Carell en este coqueto hotal). Ambos forman un matrimonio felizmente avenido aunque el hombretón comienza a padecer la crisis de los 40.

«El éxito de la saga tiene mucho que ver con el lado humano que poseen estos personajes, algo que no suele observarse en otros filmes de animación, aunque Pixar sí suele potenciarlo», dice risueño y bastante tranquilo Carell, quien riza el rizo esta vez y también se ocupa de un gemelo del protagonista. «No fue muy difícil, la verdad, porque en el fondo se trata de las dos caras de una misma moneda, solo que Gru es el gruñón y Dru el alegre, pero ambos comparten ADN y resultan al cabo más parecidos de lo que en un principio parece», añade Carell. Bueno, si dejamos el tema de la alopecia a un lado. Porque el hermano del primero posee una espléndida cabellera amarillenta, comentan que a lo Donald Trump: «Sí, lo hablamos entre nosotros, hoy día cualquier personaje poco natural se parece al presidente...», asegura Wiig. Quien, por cierto, también ha colaborado en otro título de este género, «La fiesta de la salchicha», pero nada tiene que ver aquella cinta irreverente y para mayores con reparos. «Sí, son muy distintas... Los niños que no la vean, por favor... Sin embargo, para mí fueron dos trabajos parecidos en los que aplicas el mismo sistema», confiesa la actriz. Y es que la amorosa e intrépida Lucy nada recuerda a la comestible y algo chabacana Brenda. No obstante, Lucy es también una señora de armas tomar: «Ella domina a Gru, pero éste eligió su forma de vida, mientras que la joven se adapta y hace mucho por mantenerla. Como las tres niñas». Porque recordemos que el siniestro mozo era padre soltero. Y ambos están de acuerdo en que repetir no les cansaría, todo lo contrario: «Para nada, aunque sea la cuarta vez que interpreto a Gru (porque a las tres cintas hay que sumar «Los Minions»); los guionistas son los culpables de que no me aburra nunca porque va evolucionando. Seguro que habrá más...», dice Carell, y nos lo creemos. Vaya que sí, a pie juntillas.