Las entradas de cine no bajarán

El éxito abrumador de la quinta fiesta del cine, tres días en los que la entrada costó 2,80 euros, lanzó un mensaje muy contundente: si el precio baja, la gente va más al cine. Esa, al menos, es una primera y rápida conclusión. Durante esas jornadas, las salas registraron un total de 1.513.958 espectadores, lo que supone un 98% más que la edición del año anterior, y un 663% más de los que habían acudido a las salas en los mismos días de la semana anterior, según la consultora Rentrak. Animados por estas espectaculares cifras, exhibidores y distribuidores se reunieron en la Academia de Cine para debatir sobre nuevas campañas que pudieran relanzar una industria que ha sufrido descenso de cuota de mercado de manera continuada en los últimos años y que atraviesa uno de sus peores momentos en términos económicos. Pero ese mensaje, que parecía claro para muchos, no lo era tanto para la industria, y en ningún momento se habló de pactar una reducción del importe de las entradas.

Al margen de la ilegalidad en la que incurriría el sector (Competencia no permite este tipo de acuerdos), la opinión compartida por la gente del cine es que una bajada a, por ejemplo, 3 euros, «no es sostenible. Además, las primeras semanas aumentarían los espectadores, pero, pasado el tiempo, las cifras volverían a ser las mismas que antes de la bajada con el agravante de que se ingresaría mucho menos dinero, mientras los gastos de las salas siguen siendo iguales», explica Borja de Benito, responsable de comunicación de la Federación de Cines de España (FECE).

Lo que sí acordaron fue intentar poner en marcha dos fiestas del cine al año en lugar de una y establecer acciones especiales en torno al Mundial de Brasil de fútbol. «En ningún momento se habló de una bajada de precios generalizada; es algo que no va a suceder», añade De Benito. Sin embargo, horas después de esta reunión, en la que reinó un clima de consenso y optimismo (desgraciadamente, poco frecuente últimamente en el sector), Yelmo Cineplex y Cinesa, las dos principales empresas de exhibición de nuestro país, lanzaron sendas campañas similares a la fiesta del cine para los pasados días 18,19 y 20 de noviembre, en la que, a través de distintas fórmulas, el público podía hacerse con su entrada por 3,50 euros. Ambas campañas, por uniltaterales e inesperadas, sentaron como un jarro de agua fría y, según ha podido saber este diario, generaron el enfado de varios exhibidores. «Son empresas que pueden tomar las decisiones comerciales que crean oportunas, como ya lo hizo en su día, por ejemplo, Cinesur, que lanzó una tarjeta de fidelización, la "Tarjeta 5", que cuesta seis euros y permite beneficiarse de una tarifa plana de 5 euros la entrada para cualquier película y sesión», explica De Benito. De hecho, Cinesur también se sumó a las rebajas de esta pasada semana para los poseedores de la «Tarjeta 5», que pueden adquirir su entrada por 3,5 de martes a jueves.

¿Han vuelto las dos grandes cadenas a repetir el éxito de la Fiesta del Cine? No exactamente, aunque las cifras son muy buenas. Si atendemos a las de Cinesa, con más de 40 complejos en toda España, en total, durante los tres días de la Fiesta del cine, acudieron a sus salas 336.207 espectadores, mientras que en los tres de la última promoción a 3,5, sumaron 191.876. Aunque el descenso es importante, la campaña ha funcionado muy bien, ya que esos mismos tres días de la semana anterior, sin promociones en marcha, sólo 43.341 personas se acercaron a ver una película en esas salas. Al observar el número de entradas vendidas por día, las diferencias se producen, fundamentalmente, el miércoles, cuando la venta de billetes aumentó de forma más destacada. Esta cadena no ha querido, no obstante, pronunciarse acerca de una posible bajada de precios de carácter permanente. Los datos hechos públicos por Yelmo Cineplex también reflejan una subida importante gracias a una promoción similar esta semana. Con respecto a los mismos tres días de la anterior, la cadena, con 400 salas en toda España, registró incrementos del 229 por ciento el 19 de noviembre en número de espectadores, mientras que el miércoles fue del 192 por ciento.

A principios de 2013, Christopher Dodd, senador senior de Estados Unidos y presidente de la Asociación Cinematográfica de ese país, se reunió con Mariano Rajoy preocupado por las cifras de la «piratería» de contenidos digitales en España. Esta misma semana, ese encuentro se ha vuelto a producir. El pasado martes, el senador volvía a expresar su preocupación al presidente del Gobierno. EE UU es el principal productor de los contenidos que son puestos a disposición de los internautas sin permiso de los dueños de sus derechos. Sin embargo, según ha podido saber este diario, Dodd quedó satisfecho tras las conversación con Rajoy. El representante norteamericano valora el hecho de que se haya cambiado el código penal, que permitirá la persecución delictiva de las vulneraciones en este sentido, además de la posibilidad de que los agraviados puedan reclamar daños y perjuicios gracias a la ley de enjuiciamiento civil y la futura modificación de la Ley de Propiedad Intelectual.