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Crítica de cine

Más que negro, gris marengo

Más que negro, gris marengo
Más que negro, gris marengolarazon

Director: F. Gary Gary. Guión: Arthur Marcum, Matt Holloway. Intérpretes: Chris Hemsworth, Tessa Thompson, Liam Neeson, Emma Thompson. EE UU, 2019. Duración: 115 minutos. Ciencia ficción.

Que el director de esta nueva ración de los «Men In Black» haya sido dirigida por F. Gary Gray («The italian job», «Be cool», «Fast & Furious 8»..., una trayectoria que podrían olvidar fácilmente) ya te hace recelar del resultado desde los mismos créditos iniciales. Empezando porque de los susodichos «Men» solo queda uno, porque el otro es ahora una mujer, que los tiempos aprietan mucho las tuercas con lo de la disparidad, el MeToo y en fin. Lo curioso es que nadie de los estudios haya tenido las narices de cambiar el título de la película, el gancho de toda esta historia, claro. Con el «internacional» van que chuta. Pero centrémonos ya en el quid de la cuestión: desde la sombra, sin identidad, los Hombres de Negro siempre han protegido la Tierra de los parásitos, alienígenas y otras criaturas extrañas del universo. Los mismos tipos que una niña, años ha, vio una noche desde su ventana porque los agentes ignoraban su presencia y no pudieron borrarle los recuerdos. Desde entonces, la joven, con una clara fobia social y totalmente desubicada, siempre ha deseado formar parte de la corporación, lo que termina consiguiendo tras una rocambolesca conversación con la jefa de los chicos que encarna, muy estilosa, por cierto, Emma Thompson. Su compañero de fatigas es el imponente, encantador Chris Hemsworth, que infantiliza en esta ocasión su personaje hasta extremos un poco bochornosos. Incluso hay un gag guiño a Thor. Con el pretexto de que existe un topo dentro de la organización que regula la inmigración intergaláctica en nuestro planeta y con la muerte por en medio de un importante extraterrestre amigo, la pareja debe aunar esfuerzos para encontrar al traidor y, de paso, vérselas con unos bichitos la mar de ingeniosos, aunque el minúsculo compañero de viaje de ambos tenga poca gracia. Hay un montón de acción, que eso lo controla bien Gary Gray, un humor que no siempre funciona, varias escenas en el desierto vistosas y una sorpresa del guión que alguno podía intuir, pero la falta de ideas nuevas realmente potables y, sobre todo, las ausencias acaban pesando demasiado. Porque no está Will Smith, el alma socarrona y cachonda de estos títulos, tampoco el efectivo cara palo Tommy Lee Jones, ni, aunque con menos desarrollo tecnológico, existe ese ingenuo desparpajo de la cinta original estrenada en 1997 (para algo la produjo Steven Spielberg), que sus creadores mantuvieron como buenamente se pudo en las dos entregas posteriores. Más que negro, esta vez el filme nos ha salido un poco gris marengo.

LO MEJOR

O lo más estrafalario: la respuesta de la jefa cuando la protagonista le pregunta que por qué se siguen llamando «Men In Black»...

LO PEOR

Hay regresos que una no termina de entender, y, menos, que casi ninguna de las novedades que ofrece la película funcione