Reino Unido endurecerá las clasificaciones de películas con contenido sexual
La Junta británica de Clasificación de Películas (BBFC) determina que a los espectadores del Reino Unido cada vez les preocupan más las escenas de sexo y desnudez en las pantallas accesibles a menores de 15 años
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Las clasificaciones de películas por edades en base a su contenido, que hasta ahora consideraba algunas escenas de sexo apropiadas para espectadores menores de 12 años, se endurecerán en el Reino Unido a raíz de nuevas pautas desveladas por la Junta británica de Clasificación de Películas (BBFC). Este organismo ha llevado a cabo la primera gran investigación sobre audiencias en cinco años y ha concluido que a los espectadores del Reino Unido cada vez les preocupan más las escenas de sexo y desnudez en las pantallas accesibles a menores de 15 años.
El organismo sondeó recientemente a unas 12.000 personas para averiguar cómo han cambiado las actitudes hacia el sexo, la violencia, el consumo de drogas y el uso del lenguaje en las pantallas. Así, contenido sexual que se consideraba apropiado en filmes con una clasificación de 12 o 12 A -aptas para menores de esa edad- serán actualizadas a una clasificación más estricta, a 15. Según la BBFC, los telespectadores quieren ahora "un planteamiento más cauteloso" hacia el contenido de esas escenas.
Con una clasificación 12, un espectador debe ser mayor de esa edad para ver una película, y un 12 A implica que los niños menores de 12 años solo la pueden ver si van acompañados de un adulto. En filmes con esas clasificaciones, las actuales pautas estipulan que en esas cintas "puede verse breve y discretamente" actividad sexual al tiempo que "la desnudez y el contexto sexual deben ser breves y discretos".
En las clasificaciones de 15, esa actividad puede mostrarse "pero normalmente sin gran detalle" mientras que la desnudez se permite "pero los detalles son probablemente breves o se presentan dentro de un contexto cómico". La última vez que se llevó a cabo una consulta de este tipo, en 2019, la violencia sexual, al igual que ahora, era la principal preocupación para las audiencias británicas.
Sin embargo, el suicidio, por ejemplo, o las autolesiones han pasado a ser el segundo gran tema de inquietud para los espectadores de este país, que quieren que se les alerte cuando las imágenes incluyan ese tipo de contenido. La presidenta de la BBFC, Natasha Kaplinsky, señaló que la organización está comprometida a asegurar que responde "al mundo en constante evolución que nos rodea".
"Desde la última vez que preguntamos a la gente de todo el país lo que pensaban sobre nuestros estándares, la sociedad ha cambiado, y las opiniones, y es fascinante cómo esta nueva investigación lo refleja", apuntó.