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Fiesta navideña

Obras de Bach, Corselli, Saint-Saëns, Poulenc, Fauré, Massenet, Humperdink, Mendelssohn, Haydn y Haendel. Coro y Orquesta Nacionales. Director: David Afhkam. Director del Coro: Miguel Ángel García Cañamero. Auditorio Nacional, Madrid, 15-XII-2023.
El director de orquesta David Afkham, en una imagen de archivo
El director de la Orquesta Nacional, David AfkhamArchivoArchivo
La Razón
  • Arturo Reverter

    Arturo Reverter

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Un concierto muy típico de estas fechas con una selección de obras «ad hoc», la mayoría de ellas muy significativas, que discurrió, a sala llena, por cauces amables y prenavideños. Nos lo pasamos muy bien con tan variadas músicas cantadas y tocadas con entusiasmo y buena intención. El público, algo frío al principio, se fue calentando poco a poco y mostró su entusiasmo con los bises: «Adeste fideles» y una serie de conocidos villancicos arreglados por Juan José Colomer, la mayoría de los cuales habíamos escuchado hace tiempo.
La sesión no comenzó con buen pie: el Coro inicial de la primera de las «Cantatas de Navidad» de Bach sonó desajustado, destemplado y desequilibrado: demasiados elementos vocales para una orquesta reducida. Siguió la «Sinfonía Pastoral» de la «Cantata nº 2», que discurrió por caminos más bonancibles, con excelente intervención de los oboes y cornos. De Corselli escuchamos a continuación un bien modelado nº 3 del «Responsorio de Navidad», que enlazó con el «Preludio de Navidad para órgano y cuerdas», «nº 12» del «Oratorio de Navidad» de Saint-Saëns.
El Coro fue entonándose por momentos y nos ofreció, bajo el mando elocuente y elástico de Afkham, dos páginas de Poulenc: «O Magnum Mysterium», nº 1 de «Cuatro motetes para el tiempo de Navidad», y el «Gloria in excelsis Deo», en donde las trompetas vienesas estuvieron a buena altura. Muy delicado el «Cántico de Jean Racine» de Fauré y esbelta y refinada la célebre «Meditación» de «Thais» de Massenet, donde se lució con un sonido tenue y bien conformado la concertino Valerie Steenken. Chisposa aunque algo gruesa de trazo la obertura de la ópera «Hänsel y Gretel» de Humperdink.
Escuchamos una majestuosa recreación del famoso «Vosotros, pueblos, dad al Señor gloria y fuerza», de la «Sinfonía nº 2», «Canto de alabanza», de Mendelssohn. A continuación el magno coro «La gran obra ha comenzado» de «La creación» de Haydn, donde hubo ciertas irregularidades de planificación y ajuste. El cierre del programa vino con una buena versión del consabido «Aleluya» de Haendel, que sonó afinado y bien contrastado, con todas las fuerzas desplegadas y con un orgánico que había ido ganando elementos según transcurría el concierto. Grandes vítores al cierre.