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Gina Lollobrigida: pan, amor y melancolía

El cine italiano llora por el fallecimiento de una de sus últimas estrellas clásicas, mito erótico y célebre por filmes como «Salomón y la reina de Saba»

Sin Gina Lollobrigida, el cine italiano pierde una estrella
Sin Gina Lollobrigida, el cine italiano pierde una estrellalarazon.

Gina Lollobrigida, una de las últimas divas del cine italiano de posguerra, falleció este lunes en Roma a los 95 años. El pasado mes de septiembre, la actriz fue ingresada en el hospital tras un accidente doméstico en su domicilio, que le provocó la fractura del fémur y le impidió hacer campaña por el partido 'Italia soberana y popular', en cuyas listas se presentó a las elecciones legislativas del 25 de septiembre. El pasado jueves fue ingresada de nuevo en una clínica romana, después de un empeoramiento de sus condiciones físicas, que no ha podido superar.

“La Bersagliera nos ha dejado. Con profundo dolor dan el triste anuncio su hijo, Mirko, y su nieto Dimitri. La familia pide en este momento de gran dolor, por parte de los medios, el máximo respeto”, se lee en una nota de la familia. Sus recientes problemas de salud habían propiciado una tímida reconciliación con su único hijo y su nieto, a quienes había desheredado después de años de enfrentamientos en los Tribunales.

“Estoy conmocionada y profundamente triste”, declaró a los medios italianos Sophía Loren tras conocer la muerte de su compañera de profesión e histórica rival. Una enemistad alimentada por la prensa y los estudios cinematográficos de la época, que las llevó a enfrentarse por el papel de “la Bersagliera” de 'Pan, amor y fantasía', la obra maestra de Luigi Comencini estrenada en 1953, que la convirtió en una estrella. “La Lollo”, como se la conocía en Italia, aceptó interpretar el mítico personaje también en la secuela, pero se negó a hacerlo en la última parte de la trilogía y fue reemplazada por la actriz napolitana.

Nacida el 4 de julio de 1927 en Subiaco, a las afueras de Roma, Gina Lollobrigida comenzó su carrera cinematográfica muy joven gracias a su participación en el concurso de belleza de Miss Italia. Una edición que ganó Lucia Bosé, pero que le abrió las puertas de Cinecittà y le permitió trabajar con los más grandes directores de la época; desde Pietro Germi a Mario Monicelli, sin olvidar a Vittorio De Sica o el propio Comencini, quien le regaló otro de sus grandes papeles: el del hada madrina en 'Las aventuras de Pinocho' (1971).

Tras sus primeros éxitos en Italia y Francia, donde logró otro de sus papeles más memorables con Fanfan la Tulipe --Oso de plata en el Festival de Berlín en 1952--, el éxito al otro lado del Atlántico no tardó en llegar. En Hollywood compartió pantalla con Humphrey Bogard o Burt Lancaster, y fue bautizada como “la mujer más guapa del mundo”. Inolvidable es su Esmeralda, la sensual gitana del jorobado de Notre Dame que interpretó Anthony Quinn, o su transformación en la reina de Saba junto al Salomón de Yulr Brinner.

En 2018 obtuvo su estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood, convirtiéndose en la decimocuarta personalidad italiana en recibir el prestigioso reconocimiento. También podía presumir de haber recibido un Globo de Oro por la película 'Cuando llegue Septiembre' (1961), con Rock Hudson, o siete David de Donatello, el premio más importante del cine italiano.

Retirada oficialmente desde la década de 1990, su nombre no ha dejado de aparecer en los medios de comunicación, en parte, por culpa de su agitada vida personal. La diva se casó dos veces. La primera vez lo hizo en 1949 con el médico esloveno Milko Skofic, padre de su único hijo, de quien se separó una década más tarde. Y en 2010 se volvió a casar en secreto con Javier Rigau, un empresario español 30 años más joven. La historia acabó en los tribunales con Rigau acusado –y más tarde absuelto-- de haber engañado a la actriz. Finalmente, el matrimonio, que se celebró por poderes, fue disuelto y Gina Lollobrigida consiguió que fuera declarado nulo.

El fin de su polémica unión con el empresario español fue sólo el principio de una tormentosa etapa personal, que llevó a la actriz a enfrentarse con su propia familia. En 2014 su hijo solicitó al Tribunal de Roma la incapacidad legal de su madre para proteger su patrimonio, aunque no fue hasta 2021 cuando la Corte designó a un administrador externo. Una decisión que la actriz aceptó con amargura y que la alejó aún más de su único hijo.

Andrea Milko Skofic denunció a Andrea Piazzolla, el asistente de 35 años de la intérprete, por haber dilapidado parte de la fortuna de su madre, incluidos cuadros, joyas y un coche de alta gama. En un proceso judicial aún en curso, Piazzolla, que prácticamente vivía con la Lollobrigida en su impresionante mansión de la la Vía Appia de Roma, está acusado de haber tratado de deshacerse de unos 350 artículos propiedad de la actriz en una polémica subasta. Un final amargo para “la mujer más guapa del mundo".