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Patrimonio
El incendio que hizo temer por la Mezquita de Córdoba
Un fuego dañó una parte de la ampliación de Almanzor y acabó colapsando una bóveda. Hay afectados cincuenta metros cuadrados de los 23.000 que tiene el monumento

Desde la primera hora del sábado, los responsables de la Mezquita de Córdoba trabajan para evaluar los daños que ha provocado el incendio que se declaró en las naves del monumento. Un incendio que se inició a las 21:11 horas del viernes y que se dio por acabado sobre las once de la noche. «Sentí una enorme congoja cuando llegué y lo vi, aunque es cierto que desde que se detectó el incendio y llegaron los bomberos, solo transcurrieron tres minutos. Los bomberos han permanecido allí toda la noche, y todavía siguen y se van a quedar durante el día de hoy. Han trabajado con mucha celeridad, acompañados en todo momento por el servicio de mantenimiento, que se ha volcado en esto, para proteger el conjunto del edificio. Muy pronto, el incendio estuvo controlado, aunque no extinguido, que tardó un poco más, pero el humo es como la sangre, es muy llamativo», comenta a este diario Agustín Jurado, responsable de Comunicación la Mezquita-Catedral de Córdoba.
En la extinción del fuego participó una dotación de 35 bomberos y según declaró el jefe de este servicio de emergencia, Daniel Muñoz, desde el comienzo todo el esfuerzo se puso en intentar atajar lo más pronto posible la propagación de las llamas y que no se extendieran a otras partes fundamentales del monumento, lo que hubiera sido terrible.

Él mismo explicó que la mayor dificultad de esta operación era justamente esa, que las llamas se descontrolasen, pero se consiguió muy pronto. También apuntó que tanto el fuego como el agua empleada para sofocarlo es lo que, con toda probabilidad, porque todavía hay que esperar los resultados del informe definitivo, lo que provocó que las vigas acabaran cediendo y la bóveda de la capilla de la Anunciación, colapsara y cayera. «Técnicamente es lo que ha sucedido, que el derrumbe se produjera por el fuego o el agua, pero no podemos extraer ninguna conclusión hasta recibir la investigación de la policía judicial. La realidad es que no sabemos por qué cayeron. Tampoco sabemos con absoluta certeza qué es lo que ha desencadenado este incendio. Se está investigando en este momento. Estamos a la espera de que los bomberos terminen de trabajar y de que emitan su informe correspondiente. No nos gusta aventurar», asegura Jurado.
Daños
Ayer, a primera hora de la mañana, cuando las puertas volvieron a abrirse para los visitantes, era evidente, en el interior del monumento, los efectos de este fuego, que estuvo localizado y circunscrito a la ampliación de Almanzor. La rápida actuación de los responsables, al igual que los asiduos ejercicios de prevención que se llevan a cabo en el edificio, evitaron que este incendio cobrara mayores dimensiones y que hubiera que lamentar unas pérdidas mucho peores. «Al final solo se han visto afectadas dos capillas de un área precisa del monumento. Son dos capillas cristianas. En los arcos puede distinguirse restos del humo y es cierto que hay un retablo afectado en el ático, que es la parte de arriba de la pieza. Pero de los 23.000 metros cuadrados que tiene el monumento, solo se han visto afectados alrededor de cincuenta. Es una diferencia muy grande entre lo que ha sido y lo que se pensaba».
El deán del cabildo de la catedral, Joaquín Alberto Nieva, ya señaló que el foco del incendio estaba centrado en una de las dos capillas afectadas – hay daños menores en otras dos capillas aún pendientes de valoración técnica y localizadas en la bóveda de la nave 2, a la altura de las capillas dañadas–. Parece ser que todo comenzó en la que «se usa como almacén de las sillas destinadas a las celebraciones de la Catedral, además de otros utensilios y materiales utilizados a diario en la limpieza del monumento», como informa la Mezquita-Catedral. Pudo ser un cortocircuito lo que generó las llamas, pero está aún pendiente dirimir este punto.
A pesar de que el monumento no ha cerrado al público, en todo momento se pensó en la seguridad de las personas. El propio Alberto Nieva afirmó que proteger a los visitantes y los ciudadanos era lo prioritario, al igual que proteger y salvaguardar de manera adecuada el edificio: «No hay riesgo de peligro para el resto del monumento», dijo de manera tajante.
Ahora de lo que se está pendiente es de que ya entre en funcionamiento un sistema de prevención de incendios similar al que se emplea en Notre Dame, en París, una destrucción que conmocionó a Europa y una tragedia en la que ha resultado imposible no pensar cuando se declaró el fuego en la mezquita. El objetivo es introducir un sistema antiincendios que produzca agua nebulizada. Esto tiene la ventaja de una extinción rápida, eficaz y mucho menos dañina para las estructuras. «Efectivamente, ahora tenemos un efectivo sistema contra incendios que es muy potente, pero todavía se sigue trabajando en él, así que en breve lo tendremos implementado y que es igual que el que se emplea ahora en Notre Dame de París. Es posible, de hecho, que entre en funcionamiento en octubre», explica Agustín Jurado.
EL TERCER INCENDIO DE SU HISTORIA
El incendio que el viernes afectó a la Mezquita-Catedral de Córdoba es el tercero que sufre a lo largo de su milenaria historia. Solo hay constancia de dos anteriores: el primero fue en 1910, hace 115 años, y el segundo en 2001. El 29 de mayo de 1910, la Mezquita de Córdoba sufrió el primero de ellos, que fue causado por una descarga eléctrica sobre el cimborrio del crucero del templo. El otro tuvo ocasión mucho más recientemente, el 5 de julio de 2001. Un fuego en las dependencias del archivo destruyó aproximadamente 25 legajos de los más de 5.000 almacenados.
Las causas se relacionaron con la explosión de dos aerosoles, posiblemente activados por el efecto lupa del sol en una sala sin refrigeración y con temperaturas muy altas. La Mezquita-Catedral de Córdoba es uno de los monumentos más emblemáticos de España y un referente mundial del arte islámico. Construida en el siglo VIII como mezquita omeya, fue transformada en catedral cristiana en el siglo XIII tras la Reconquista. Fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1984. Es un símbolo del legado andalusí y uno de los destinos turísticos más visitados de Andalucía.
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