Los entresijos de la obra de Ghery en Bodegas Riscal

Sesenta fotografías adentran al visitante en los entresijos de esta «impresionante obra» del arquitecto canadiense

Los entresijos del proyecto que Frank Ghery realizó para la construcción del hotel en Bodegas Marqués de Riscal se plasman en sesenta fotografías que exhibe en Logroño el arquitecto asesor de la dirección de obra de este edificio, Domingo García Pozuelo, con las que elaboró un “diario de trabajo”.

García Pozuelo, exdecano del Colegio Oficial de Arquitectos de La Rioja, en una entrevista con Efe, ha explicado cómo durante el proceso de construcción del hotel, entre 2002 y 2006, semana tras semana, elaboró un “diario de trabajo” que envió a Ghery para que pudiera seguir de primera mano la evolución de su nueva creación, ubicada entre viñedos.

Ese “diario de trabajo” refleja un momento “irrepetible” de la construcción de este hotel de lujo de Marqués de Riscal, ubicado en Elciego (Álava), dentro de la Denominación de Origen Calificada (DOCa) Rioja, y que tiene una estrella Michelín.

Estas sesenta fotografías adentran al visitante en los entresijos de esta “impresionante obra” del arquitecto canadiense, afincado en Estados Unidos, y recientemente galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de las Artes.

García Pozuelo ha reconocido que para él fue “un privilegio, una suerte y una experiencia irrepetible e impresionante” poder participar en un proyecto dirigido por Ghery, quien “se entusiasmó” con Marqués de Riscal en una de sus visitas a la bodega, a través de los responsables de la obra del Museo Gugghenheim de Bilbao, diseñado también por él.

Entre las anécdotas de la construcción, ha relatado que esta obra, que se levanta sobre el botellero de la bodega, estaba pensada para ser la sede del Consejo de Administración de Bodegas Marqués de Riscal, cuyos dueños cambiaron de idea cuando Ghery visitó las instalaciones, bebió un vino de su año de nacimiento -1929-, “se entusiasmó” e hizo el proyecto de un edificio nuevo “vanguardista”.

Entre las fotografías, que forman parte de una colección más amplia de ese arquitecto afincado en La Rioja, el visitante puede apreciar las distintas fases de la construcción del hotel, desde su envolvente curvilínea hasta las piezas prismáticas en distintos niveles; y los tres grandes soportes principales sobre los que se sustenta todo el proyecto.

Otros detalles que se pueden apreciar son los cerramientos exteriores del edificio, que se componen de fachadas ventiladas de piedra arenisca para las piezas ortogonales; mientras que la envolvente curva es de titanio.

Ghery dio a este revestimiento tres tonos característicos de Marqués de Riscal, como son los rojizos similares a los del vino, el dorado de la malla empleada en sus botellas y el plateado de la cápsula de las mismas, que también se pueden visualiza en la exposición, que aspira a itinerar por España.

García Pozuelo ha valorado la “importantísima e inteligente” apuesta de futuro, en lo económico y en diseño rupturista, que realizó Marqués de Riscal, construida en 1858, al encargar a Ghery el diseño de este hotel de lujo, que “ha dado un resultado excelente” y que ha situado a la firma como “un reclamo turístico de primer nivel”.

En su opinión, esta obra es “un ejemplo del impacto de la arquitectura del vino en la Rioja, que ha llegado a transformarse en ejemplo para grandes bodegueros del mundo y, en particular, para los franceses, que apostaron por arquitectos de prestigio para hacer de sus bodegas auténticas catedrales del vino”.

El sello que arquitectos de prestigio como Frank Ghery, Santiago Calatrava y Zaha Hadid han puesto en la DOCa Rioja ha hecho que “el vino cobre una dimensión añadida a su valor como bebida y se transforme, además, en un lugar de peregrinaje, cultura y reconocimiento que entraña el proceso de elaboración”, ha dicho.

Sin embargo, cree que, dada la coyuntura económica, no será fácil que estos ejemplos vuelvan a repetirse en el mundo del vino porque “hay un parón de nuevas edificaciones vinculadas a este sector en España, salvo casos aislados”, como la reciente rehabilitación, tras nueve años, del Castillo de Ygay de Bodegas Marqués de Murrieta, en Logroño.