Aniversario

El Compact Disc cumple cuarenta años: entre Richard Strauss y ABBA

La idea de crear un disco de audio óptico surgió en 1974, cuando se querían sustituir los discos de vinilo

EL primer CD lo presentó Sony en 1978
EL primer CD lo presentó Sony en 1978archivo

La revolución musical tecnológica llegó a finales de febrero de 1982, al publicarse por primera vez un Compact Disc. Aquel hito tecnológico no se quedó solo ahí. El CD también serviría para el almacenamiento de datos (CD-ROM), de vídeo (VCD y SVCD) y para las grabaciones domésticas (CD-R y CD-RW). Muchas de estas funcionalidades del CD han evolucionado con los años y, actualmente, han sido sustituidas por las memorias USB, el almacenamiento en la nube, el MP3, o el WAV, por ejemplo.

La idea de crear un disco de audio óptico surgió en 1974. Se querían sustituir los discos de vinilo, cuya calidad sonora no era la que muchos esperaban en aquellos momentos. El sonido del vinilo, por así decirlo, había quedado anticuado. La calidad del audio tenía que ser superior. Debía desaparecer los ruidos en segundo plano como consecuencia del desgaste. Fue la empresa Philips la que investigó no solo en este tipo de discos, sino en el reproductor para poderlos oír. El tamaño del CD se estableció en 11,5 centímetros, que es la medida de la diagonal de un casete compacto, también un invento de Philips.

Como ocurre muchas veces, otra empresa también estaba investigando sobre lo mismo. Este es el caso de Sony Corporation. EL primer CD lo presentó Sony en 1978. Aquel prototipo podía albergar 150 minutos de música. Sony y Philips se unieron para diseñar conjuntamente ese nuevo disco de audio digital. Aquel equipo estaba dirigido por Kees Schouhamer Immink. En 1980 ya tenían, físicamente, un reproductor y el soporte donde grabar la música.

En 1981 le presentaron el proyecto al director de orquestra Herbert von Karajan, vinculado al sello musical Deutsche Grammophon. Karajan se entusiasmó con aquel sonido tan perfecto y todo el proyecto en sí. Durante el Festival de Salzburgo de aquel año promovió el CD como un producto que revolucionaria el mundo musical. A partir de 1983 este sello discográfico empezó a comercializar todas sus grabaciones de música clásica en este nuevo formato. La primera grabación que se puso a la venta fue la Sinfonía alpina de Richard Strauss, con la Filarmónica de Berlín y la dirección de Karajan. El segundo fue la colección de valses de Frederic Chopin, interpretadas por el pianista chileno Claudio Arrau.

El primer CD producido en los Estados Unidos fue en 1983, por el sello CBS. Editaron 52nd Street de Billy Joel. Entre las canciones del álbum destacamos “Honesty”, “My life”, “Big Shot”, “Rosalinda’s eyes” o “Until the night”. Con anterioridad a este álbum, en 1982, en Europa, el sello Polydor publicó The Visitors del grupo sueco ABBA, siendo el último álbum del grupo antes de su primera separación en ese mismo año. El álbum fue número 1 en Alemania, Bélgica, México, Holanda, Noruega, Reino Unido, Suiza y Suecia.

A partir de ese momento todas las discográficas dejaron de producir los vinilos, quedando como parte de un pasado. Es más, se sacaron en CD, con remasterizaciones, todas las grabaciones hechas en vinilo y en discos de 75rpm. El vinilo pasó a ser historia de la música sonora. Antes de la aparición del CD, las discográficas utilizaron el Dolby Digital System para las grabaciones de los vinilos. Esta tecnología quedó superada por el CD y su reproducción a través del láser. Aunque la perfección del sonido es muy superior al vinilo, aún existe la rivalidad entre los que prefieren el sonido del vinilo y los que apuestan por el CD. De ahí que el vinilo haya vuelto a ponerse de moda y ambas tecnologías convivan en el mercado internacional de la música.