El gran impacto económico del festival Starlite

Sandra García-Sanjuán, fundadora del famoso festival Starlite Catalana Occidente de Marbella, puede presumir orgullosa de haber construido un destino gracias a su incesante esfuerzo, su visión empresarial y su manera de reinventarse año tras año. Y es que a día de hoy, éste es mucho más que un festival, «somos un dinamizador de destino y un generador de contenidos». El festival boutique más importante de Europa regresa un año más, celebrando su once edición tras dos difíciles años de pandemia, en los que pese a las dificultades y restricciones nada impidió que se celebrara. Una esperadísima vuelta a la normalidad con la que la empresaria se muestra feliz en una entrevista para LA RAZÓN. «Hemos hecho un gran esfuerzo por seguir, hemos sido el único gran festival internacional que se ha hecho durante la pandemia», asegura García-Sanjuán.

Marbella se vuelve a vestir del glamour y la luz que solo Starlite Catalana Occidente le otorga durante los meses de verano. Comenzó este viernes día 10, con la actuación de Juan Magán abriendo este espacio único, y durará hasta el 4 de septiembre, con Estopa como grupo encargado de poner el broche final. Un cartel de lujo que reunirá a más de 200 artistas internacionales de la talla de C. Tangana, Sebastián Yatra o Jessie J, entre otros muchos, y que como cada año, se reinventa para ofrecer una experiencia única a sus visitantes. Este año, según desvela su creadora, cuenta con una gran inversión tecnológica, «una pantalla gigante en la grada, que va para toda la parte del lunch, y van a pasar muchas cosas ahí: muchos contenidos, realidad aumentada, realización en directo, mucha tecnología... todo eso va a dimensionar mucho el espacio». No solo eso, también sus fundadores apuestan por un festival más sostenible; un ejemplo de ello son las lonas recicladas que se han instalado esta edición; además «estamos utilizando energías renovables y limpias para todo el festival». Grandes apuestas porque «somos un festival al aire libre, rodeado de naturaleza, muy integrado con el medio ambiente, y es muy importante para nosotros este punto y alinearnos con la Agenda 2030 y los objetivos de desarrollo sostenible», asegura.

Se prevé, además, que obtenga un impacto económico de 227 millones de euros como consecuencia principalmente del récord de visitantes al Festival, ya que se estima que supere las 350.000 personas; de los que históricamente el 51,7% es público nacional y el 48,3% es internacional. Un crecimiento del 24% respecto del 2019, la última edición pre-covid, que alcanzó los 183 millones de euros y 281.427 asistentes. Se posiciona así como una de las claves de la recuperación económica del sector turístico de la Costa del Sol. Pero no solo a nivel turístico, Starlite Catalana Occidente genera 1.000 puestos de trabajo directos con una duración media de 4 meses, por lo que formar parte de la organización del Festival supone una oportunidad extraordinaria, especialmente para los trabajadores de la Costa del Sol, y así lo manifiestan volviendo cada año a presentarse al proceso de selección. Y es que el Festival cuenta con un índice de repetición entre sus empleados del 70%; algo que su fundadora califica ya como «una familia».

De esta forma, el Festival se presenta como un motor para el empleo de la zona y de su área de influencia. Durante los últimos años, ha representado más del 95% del negocio de la música en vivo en la provincia de Málaga y el 34,6% de Andalucía. Además, de acuerdo con el informe anual de la APM (Asociación de Promotores Musicales), Starlite Catalana Occidente es el Festival más importante del territorio nacional, ocupando la primera posición en impacto económico (un 46% por encima del segundo).

Cuando preguntamos a su presidenta por las claves del éxito del Festival, que ha conseguido posicionarse como uno de los principales a nivel nacional y europeo, Sandra lo tiene claro: «Por un lado el equipo humano y por otro, es que hemos pensado a lo grande siempre desde el principio». «El reinventarnos cada año, buscar siempre la excelencia y sorprender ha hecho que esto sea el punto de reunión de los artistas donde se sienten como en casa», sentencia Sandra García-Sanjuán. Así es como el Grupo Starlite tiene el «superpoder» de transformar la ciudad malagueña y llenar sus noches de verano de magia e ilusión, fusionando música en vivo, cultura y gastronomía en un espacio emblemático, y acogiendo a las estrellas de la música nacionales e internacionales; una cita marcada en el calendario de familias y rostros conocidos año tras año.