Del “Amo a Laura” a Íñigo Quintero: ¿existe el pop cristiano en España?
El éxito del artista español, inesperado e inspirado por la religión, lanza la pregunta: ¿puede llegar el auge de canciones que hablan de Dios? ¿hay pop cristiano en España?
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En 2006, cuando nuestras cabezas estaban vírgenes y desarmadas ante las campañas virales, apareció un grupo de la nada. Se llamaban Los Happiness y tenían una canción con mensasje para el mundo: “Amo a Laura” defendía la abstinencia hasta el altar y se reía de una serie de valores tradicionales parodiando la imagen de jóvenes catequistas. Ellos, con jersey de tonos pastel y pantalón de pinzas, pelo de ICADE. Ellas, falta larga y blanco virginal. La canción arrasó por lo que tenía de cómica y por tratarse de una rareza absoluta. No se conocía en aquellos tiempos escena alguna que tuviera que ver con el pop cristiano, algo que en Estados Unidos es más que popular y ha servido de caladero para el surgimiento de grandes artistas, como Taylor Swift. Ahora, Íñigo Quintero ha ocupado el primer puesto de la lista mundial de Spotify con una canción que habla de Dios. Nadie se lo explica todavía. Y no es el único que lo hace en España: la realidad de años después le ha dado la vuelta a esa parodia creándose una subcultura de pop cristiano en España.
El reciente estreno de la serie “La mesías” (Movistar +) ha sacado del olvido uno de los ejemplos de ese estilo musical: Flos Mariae, compuesto por siete hermanas, cuenta su historia así en su propia web. “Alba, María, Flor, Estel, Victoria, Patricia y Montserrat prometieron a la Virgen que si su madre, María Durán de Bellido (la fundadora de CatholicosOnLine), sanaba del tumor maligno, harían un grupo musical para venerar a la Virgen María y propagar la fe cristiana católica, y María Durán de Bellido prometió a la Virgen que las ayudaría a conseguir hacer este grupo musical, para Gloria de Dios. María Durán de Bellido pasó muy bien la operación y se curó, por eso aquí tenéis la promesa cumplida”. En 2014 publicaron su primer disco, de 21 temas y en 2021 anunciaron su disolución para dar lugar a dos grupos nuevos: «4HBD – 4 Hermanas Bellido Durán” y “Mariah's Pop”. Ambos tienen perfil en Spotify (a diferencia de Flos Mariae), aunque las primeras apenas suman 352 oyentes diarios y las segundas poco más de mil.
Caso diferente es el de Hakuna, fundado en 2012, como parte de los preparativos para la Jornada Mundial de la Juventud 2013 de Río de Janeiro, que dio lugar a una formación musical de más de 40 miembros que suma 140.000 oyentes mensuales en la plataforma. El propio Papa Francisco les recibió y les invitó a “salir a la calle y vivir el evangelio”. Igual que el caso de Íñigo Quintero, su salto a la popularidad se dio a través de la plataforma Tik Tok hasta el punto de que lograron llevar a 8.000 personas al Palacio de Vistalegre de Madrid en septiembre de 2022 para presentar su disco “Qaos”, cuyo tema, “Huracán”, ha alcanzado los dos millones de visualizaciones. Este año, más de 60.000 jóvenes fueron a su concierto gratuito en la Plaza de Cibeles.
El dúo Besmaya lo forman Javi Ojanguren y Javi Echávarri, amigos desde los 3 años que comenzaron su carrera en 2020 publicando su música en internet. Tras su éxito en streaming, en 2022, el dúo firma con Sony Music, con quien publican su primer EP, “BESMAYA”, llegando a atraer a más de medio millón de oyentes en plataformas digitales. Tanto el dúo como la multinacional evitan calificarles de “pop cristiano” y utilizan la denominación “pop distendido” para denominar su música, que habla de la trascendencia y remite a Dios aunque no explícitamente. 400.000 oyentes mensuales en Spotify tienen su propia opinión sobre el asunto, que ellos prefieren no etiquetar.
Con el formato de una “big band” nacieron Trigo 13, un conjunto nacido en 2021 inspirados por el fenómeno Hakuna y organizados en torno a la parroquia de Santo Tomás Moro de Mahadahonda por un grupo de personas que se autodenominan “hippies católicos” y que han publicado multitud de sencillos. Autodefinidos como “música en misión”, acumulan más de 11.000 oyentes mensuales. Inevitablemente en esta lista tiene que aparecer un sacerdote al que le gusta la música, como a Luispo, el padre Luis, que asegura en su perfil de Spotify que “cada acorde, cada palabra, nacen de una experiencia vivida, rezada”. Con más de 40.000 oyentes mensuales, este sacerdote del Opus Dei ha publicado hasta siete álbumes de canciones que hablan del amor a Dios y de la esperanza.
Otros artistas con menor repercusión son Tuyo: “Somos un grupo de artistas llamados a llevar a los demás a un encuentro personal con Jesús en un entorno de intimidad y oración†” o Paula Arias: “Me llamo Paula Arias, y desde el verano de 2017 tengo la inmensa suerte de poder componer canciones que hablan de mi vida tocada por Jesús. Tras descubrir que estas canciones son un regalo para los demás, decidimos grabarlas en un estudio”. En Spotify hay listas de rock cristiano en español, pero principalmente incluyen a artistas latinoamericanos. Veremos si pronto aparece una superestrella española de pop que hable de Dios.