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Glass: «Mi ópera sobre Disney es la quintaesencia de lo americano»

El autor supervisará en Madrid los ensayos de su ópera. En la imagen, la partitura y algunos de los bocetos de «The Perfect American»
El autor supervisará en Madrid los ensayos de su ópera. En la imagen, la partitura y algunos de los bocetos de «The Perfect American»larazon

Philip Glass (Baltimore, EE UU, 1937) es quizá el único nombre que todos los primerizos en la ópera pueden recordar si les preguntan por un compositor vivo. Suponemos, que, como todos, él también tendrá motivos de queja, pero no por falta de repercusión de sus obras. Responde desde Nueva York de muy buen humor y, enseguida, confiesa la razón. Está en los días previos a escuchar por primera vez los ensayos de su nueva producción, «The Perfect American» (el próximo 22 de enero), que el destino ha querido que estrene en Madrid y no en Nueva York: «Es el momento más emocionante para un compositor», reconoce. Será una noche grande para el Teatro Real, quizá la más desde que Gerard Mortier aterrizó en el coliseo madrileño. Así recuerda el compositor los orígenes del proyecto: «Hablé por primera vez con Mortier hace cuatro años y después leí el libro, que me pareció muy interesante. Comprendí que se trataba de un hombre poderoso, pero la ópera no es un documental sobre cómo fue Disney porque, en realidad, tampoco lo sabemos. Después Mortier dejó la New York City Opera, volvió a establecerse en Europa y me comentó la posibilidad de hacerlo en España y en la English National Opera. Ha estado muy pendiente del proyecto, prestando atención a cada pequeño detalle del desarrollo».

Los últimos meses

«The Perfect American», la novela, que dio origen al libreto, que ahora Turner edita en castellano, no es precisamente un retrato amable del padre de Pluto, Micky y el Pato Donald. Peter Stephan Jungk quiso mostrar su lado más oscuro. Para ello creó el personaje de Wilhelm Dantine, un ilustrador austríaco que trabajó durante largo tiempo en su factoría, hasta que sufrió un despido injusto, lo que le impulsa a rastrear los últimos meses de la vida del creador. Tras leer el libro, Glass calificó el último periodo de Disney como inimaginable, alarmante y verdaderamente aterrador». ¿Será así la partitura? Ahora nos dice que «no recuerdo exactamente como describí la novela, pero sí puedo decirte que cada ópera tiene su propio lenguaje musical, es difícil relacionar unas con otras, aunque en este caso he prestado especial interés en reflejar que Disney tenía un fuerte carácter americano; es, por tanto, una ópera sobre la quintaesencia de lo americano. La historia de un hombre que creció en el sur, que se fue a Florida, a Los Ángeles, a varios lugares... Y, al cabo, no es únicamente eso tampoco, sino una reflexión sobre la muerte. En la ópera, en realidad, mostramos sólo los dos o tres meses anteriores a su muerte: es la historia de un hombre enfermo y de cómo se enfrenta a la desaparición». El reparto es mayoritariamente anglosajón. Christopher Purves interpretará a Walt Disney; David Pittsinger a su hermano Roy; Donald Kaasch, al dibujante Dantine, que indaga en su pasado. Y también ha representado a otros dos grandes personajes norteamericanos: Andy Warhol (John Easterlin) y Abraham Lincoln (Zachary James).

Sólo cultura popular

Preguntamos por la vocalidad del protagonista, pero Glass prefiere mostrarse cauteloso: «Esto es una especie de retrato. Y ya sabemos que tienen mucho que ver con la persona que los hace, pero no se trata de una biografía pictórica de Disney. Este gran nombre es sólo una base para hablar de constantes como el arte, la vida, la mortalidad... Lo más importante es la actitud que él tenía, o más bien el deseo de ser una persona importante del mundo de la cultura. Hablamos de la cultura popular, es cierto, pero eso se trata de algo muy americano. Porque en este país no diferenciamos demasiado entre la alta y la baja cultura. Fundamentalmente existe una forma popular y otras más elevadas como la ópera, y en "The Perfect American» combinamos ambas», nos reponde.

Aunque para muchos sea sólo el padre de la música minimalista, Glass tiene un sólido y nutrido corpus operístico. Esta nueva creación se suma a otros retratos de personajes como Vasco de Gama, Cristóbal Colón o Gandhi. «Estoy muy interesado en las grandes personalidades y Disney lo es –admite el autor–. Me tomo muy en serio la industria del entretenimiento, no creo que sea una cosa trivial». Tampoco es menor que el éxito haya rozado con cierta asiduidad sus veinte estrenos operísticos. Él prefiere la modestia: «La ópera es un trabajo colaborativo: es necesaria la música, el movimiento, la imagen y la voz. Por eso se necesitan grandes colaboradores. El autor es el que inicia la idea, pero necesita de mucha gente que bucee en ese universo». La mayor prueba no son estas palabras del creador, sino que para el estreno Glass ha contado con dos de sus habituales: Dennis R. Davies, pianista y director de orquesta, con quien trabaja desde hace más de 30 años, y Phelim McDermott, que ya dirigió la mítica «Satyagraha», sobre Ghandi.